En un año caracterizado por incendios forestales históricos, sequías prolongadas e inundaciones sin precedentes, los fenómenos extremos se vuelven cada vez más frecuentes. Según uno de los últimos informes del IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático), para cada año comprendido entre 2022 y 2026, este organismo prevé que la temperatura media anual sea entre 1,1°C y 1,7°C superior a los niveles preindustriales, la media del período 1850-1900. El año 2021 cerró con el planeta habiéndose calentado en 1,1ºC en promedio, una cifra que nos acerca a un punto de no retorno según los expertos.

Este informe, titulado ‘Cambio Climático: las bases científicas’, fue suscrito por 195 gobiernos de todo el mundo. Ante esto, las Naciones Unidas han declarado con firmeza que el sector energético juega un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático, dado que es responsable en la actualidad de tres cuartas partes de las emisiones de gases de efecto invernadero.

En este marco de urgencia, existen empresas que han apostado por invertir tiempo, conocimiento y capital en innovar para sustituir los grandes generadores de contaminación, como la producción de energía mediante hidrocarburos, por fuentes como la energía solar fotovoltaica, limpia, eficiente e inagotable. Un ejemplo de ello lo encontramos en empresas como Soltec, una firma murciana especializada en soluciones integradas de energía solar fotovoltaica, con casi dos décadas de trayectoria, comprometida con el futuro y con un decidido compromiso con las energías renovables y el medio ambiente, y que apuesta por la innovación y la investigación para ofrecer una tecnología de vanguardia en el sector.

«La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) ha reconocido que la energía solar fotovoltaica es la tecnología básica clave para lograr una transición energética competitiva y eficiente, además de ser la más barata de generar», asegura Raúl Morales, CEO de Soltec. «La UNEF presentó una serie de buenas prácticas para maximizar el impacto positivo de la fotovoltaica y desde la compañía hemos abrazado esa hoja de ruta para impulsar medidas clave con las que aportar nuestro granito de arena en la lucha contra el cambio climático», añadió.

La Comisión Europea es consciente del impacto que puede tener apoyar y promover de forma explícita el uso de este tipo de energía, tal y como aparece en el borrador del plan REPower EU. Y es que el organismo calcula que para llegar al nuevo objetivo de doblar la energía renovable para 2030, sería necesario triplicar la capacidad solar de la UE, añadiendo 420 GW. «La consecución de este objetivo tan ambicioso sólo es posible si combinamos los proyectos de generación de energía solar distribuida con las grandes plantas», matiza Raúl Morales. «Porque el salto hacia un futuro sin emisiones pasa por desarrollar planes que garanticen la generación de la energía limpia necesaria para lograr la descarbonización y frenar el avance del cambio climático, así como de sus catastróficas consecuencias tanto para el medio ambiente como para la sociedad en su conjunto», concluyó.