Desde que se pusiera en marcha, el Banco de Cerebros de la Arrixaca ha recibido 280 donaciones, tanto de pacientes neurológicos como de donantes sin patología cerebral. Desde 2020 este servicio es completamente autónomo y realiza todo el proceso de estudio molecular y diagnóstico, gracias al trabajo de un patólogo especializado en neuropatología y en el estudio de las enfermedades neurodegenerativas. Además, participa en un estudio nacional sobre la Parálisis Supranuclear Progresiva (PSP).

El Banco de Cerebros del Área I está ubicado dentro del Servicio de Anatomía Patológica y comenzó a funcionar en 2007 y recibe una media de 20 donaciones al año de donantes de todas las edades.

Los cerebros que provienen de pacientes sin patología cerebral son especialmente valorados por servir de casos control en los estudios comparativos.

Los Bancos de Cerebros no solo sirven para la investigación de enfermedades neurológicas, sino también para otro tipo de proyectos de investigación que necesitan estudiar el tejido cerebral. Las muestras locales que se recogen en el Banco de Cerebros están a disposición de la Red Nacional de Biobancos, y esta, a su vez, está abierta a colaboraciones internacionales.

El servicio de la Arrixaca recibe cada mes una media de 15 peticiones, y salen del banco alrededor 20 muestras de tejido cada año. La mayor parte de ellas están orientadas a la investigación sobre Alzheimer.

La captación de las donaciones se hace por petición del personal sanitario en los fallecimientos en residencias o ingresos, o a petición propia de los familiares. Para ello hay un teléfono disponible 24 horas (618 680 370). El equipo extractor se organiza de inmediato para realizar la intervención en el menor tiempo posible, ya que es importante velar por la calidad del tejido.

El estudio diagnóstico del tejido cerebral es de gran importancia para el avance de las ciencias neurológicas, y enriquece y amplía el área de conocimiento de la neurología.

Este campo de la Anatomía patológica aporta gran información de la fisiopatología, lo que permite dar lugar a la catalogación de nuevas enfermedades o nuevos subtipos de patologías que están ya etiquetadas.