El delegado del Gobierno, José Vélez, visitó este lunes el nuevo Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) de El Espalmador, en Cartagena, para supervisar el final de las obras y anunció su inmediata apertura para comenzar a atender a los inmigrantes que lleguen a la costa murciana en los próximos días. Fuentes de la Delegación del Gobierno en la Región confirmaron que tendrá una capacidad a plena ocupación de unas 440 personas.

José Vélez, acompañado del jefe Superior, Ignacio del Olmo, recorrió los nuevos módulos que acogerán a los inmigrantes y que permitirán atenderlos en mejores condiciones. "Es una gran satisfacción poder anunciar la próxima apertura de estas instalaciones, porque todos sabemos la necesidad que tenemos de poner en marcha el CATE. Es importante que todos los profesionales de los distintos cuerpos y organizaciones que participan en los dispositivos de rescate puedan atender a los inmigrantes de la mejor manera posible, pero también es fundamental que la Policía Nacional pueda hacer su trabajo en condiciones razonables, como va ser ahora", explicó el delegado del Gobierno y secretario general del Partido Socialista en la Región.

Vélez indicó que era "imposible mantener" las condiciones en las que la Policía Nacional tenía que trabajar hasta ahora. "A pesar de esas malas condiciones, siempre ha realizado su trabajo con una profesionalidad envidiable, y por lo tanto supone una gran alegría comprobar hoy aquí que ya disponemos de unas instalaciones coherentes a los tiempos que vivimos", añadió.

El delegado del Gobierno insistió en el carácter temporal de este CATE antes de su traslado definitivo a otra zona de la ciudad. "Nosotros somos gente de palabra y vamos a cumplir con el acuerdo para estar aquí durante un año aproximadamente, aunque intentaremos agilizar los trámites para ir cuanto antes a la ubicación definitiva", manifestó.

Vélez también valoró la "voluntad" que ha tenido la Delegación del Gobierno para acordar el traslado definitivo a otro emplazamiento, tal como planteaban otras instituciones y administraciones. "No hay ningún problema, nos hemos puestos de acuerdo y sólo queremos que todo el mundo esté satisfecho con el punto definitivo en el que se instale el CATE. Bajo ningún concepto venimos a incordiar o a molestar a nadie, sino todo lo contrario, venimos a poner todo lo que esté en nuestra mano para salvar vidas, de momento en esta ubicación y, posteriormente, en la zona definitiva acordada, en la falda del monte de Galeras", declaró.