Una cosa es apagar los escaparates a las 22.00 horas y otra muy distinta plantearse recortes en la iluminación navideña para ahorrar energía. Ni la Comunidad Autónoma ni los comerciantes de la Región quieren plantearse que el Plan Energético apague la Navidad, en contra de iniciativas como la de la Generalitat Valenciana, que pretende rebajar un 20% el gasto en alumbrado durante las próximas fiestas. La Consejería de Empresa no piensa hacer ningún tipo de recomendación en favor del ahorro, mientras que afirma que la decisión corresponde a los ayuntamientos.
La patronal regional del comercio Coremur recuerda la experiencia que vivió la ciudad de Murcia el año pasado como consecuencia del retraso que se produjo en el encendido de las luces y asegura que la demora dejó las calles «tristes y vacías». Su presidenta, Carmen Piñero, se lamenta de que, ante la falta de ambiente, la clientela «se desplazó a los centros comerciales». A su juicio, «no se puede bajar la iluminación navideña: las calles se quedan muy tristes. Creo que habrá que buscar otros sitios en los que ahorrar».
La patronal Coremur recuerda que el retraso del encendido en la capital el pasado año desplazó a los clientes
Tras la demora de las luces en 2021, que obligó al equipo de gobierno encabezado por José Antonio Serrano a soportar duras críticas de los concejales del PP, fuentes del Consistorio han asegurado que Murcia no tiene intención de hacer recortes en el alumbrado. «Se van a hacer otras actuaciones para reducir el consumo», pero no afectarán «a la iluminación de la vía pública», según indicaron desde la Glorieta.
Las pretensiones de salvar las luces contrastan con los planes de ahorro
Las pretensiones de las instituciones y de los empresarios de la Región de salvar las luces de Navidad de las restricciones en el consumo energético chocan con los propios planes de ahorro energético que han elaborado la Comunidad Autónoma y el Ayuntamiento de Murcia para reducir el gasto. Así, el Consistorio ha anunciado un plan para ahorrar energía que incluye, por ejemplo, el apagado del alumbrado de los edificios públicos a partir de las 22.00 horas. También prevé reducir la potencia de la iluminación de las calles que tienen lámparas LED «del 100% de su potencia al 60% en las primeras horas; y a partir de la medianoche, del 60% al 30%». En los pasillos y despachos de los edificios municipales se prevé «la reducción del 33% de los puntos de luz, siempre que se garanticen las condiciones de seguridad y salud de los centros de trabajo». Además, tanto el Ayuntamiento de Murcia como la Comunidad pretenden implantar nuevas tecnologías en iluminación que conduzcan a una reducción del gasto energético.
El debate sobre el gasto energético que asumen los ayuntamientos como parte de la ornamentación navideña se viene produciendo ya desde hace varios años, por lo que resulta previsible que el elevado precio de la energía y las exigencias planteadas por la UE para reducir el consumo y la dependencia del suministro de Rusia acaben obligando a las instituciones públicas y a las empresas a buscar fórmulas para reducir la factura de la decoración luminosa que demanda el comercio y la hostelería para mantener las ventas.
Aunque el Gobierno regional y ayuntamientos como el de Murcia han elaborado planes de ahorro energético con los que pretenden reducir al máximo el consumo de electricidad en las dependencias de la Administración, en los edificios públicos y en la calle, ninguna administración quiere hablar de restricciones para abaratar la factura eléctrica de las fiestas.
Tras la experiencia de 2021 el Gobierno de la Glorieta descarta las restricciones en la iluminación viaria
Fuentes de la Consejería de Empresa, Empleo, Universidades y Portavocía aseguraron que el departamento de Valle Miguélez desconoce si el Plan Energético elaborado por el Gobierno central, que debe ser enviado a Europa a finales de este mes, ha incluido algún tipo de recortes en la iluminación de Navidad, aunque tampoco se plantea seguir el ejemplo de la Comunidad Valenciana ni hacer ningún tipo de recomendación a favor del ahorro. La Consejería deja claro que «los ayuntamientos son los que pueden adoptar las medidas que consideren con el alumbrado navideño».
Tampoco la Federación de Municipios de la Región se ha planteado todavía ninguna iniciativa, aunque su secretario general, Manuel Pato, apuntó que la mayor parte de los consistorios instalan luces LED, que, además de tener un menor consumo de energía, «permiten regular la intensidad» para adaptarla a las necesidades en cada momento.
Manuel Pato considera que, de producirse algún tipo de recomendación dirigida a los ayuntamientos, tendría que partir de la Federación Española de Municipios, que preside el alcalde de Vigo, Abel Caballero. Sin embargo, tiene claro que «esta Navidad será distinta», debido a las circunstancias que imponen la guerra en Ucrania y el cambio climático.
De momento, la iniciativa de la Generalitat de recortar un 20% el gasto en las luces de Navidad ha dividido a los ayuntamientos valencianos. Hay alcaldes que temen un impacto negativo en el comercio y la hostelería y otros que consideran realista la propuesta.
