La Opinión de Murcia

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Social

Las ONG reparten a los inmigrantes por otras provincias al no quedar plazas en la Región

Convivir Sin Racismo denuncia que se ha trasladado a extranjeros al CIE de Valencia, algo que la Delegación del Gobierno niega

Personas en el campamento, en una foto de este miércoles difundida por la letrada Rosa Manrubia. L.O.

Las organizaciones no gubernamentales (ONG) están repartiendo por otras provincias de España a los inmigrantes que llegan estos días al litoral de la Región, dado que no quedan plazas libres en los recursos de acogida de la comunidad murciana, indicaron a esta redacción fuentes de estas entidades humanitarias.

Mientras, efectivos de la Unidades de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional (cuerpo que tiene las competencias en exclusiva en Extranjería) se movilizaban ayer al campamento improvisado de Escombreras. La Delegación del Gobierno en Murcia aseguraba por la mañana que se iba a vaciar en el día de ayer, aunque las perspectivas cambiaron con la llegada de más barcazas. Una treintena de personas tuvieron que pernoctar en el lugar, un recinto insalubre, según aseguran abogados, policías y miembros de oenegés que lo han visto.

En concreto, en el día de ayer un barco de Salvamento Marítimo interceptaba una patera al sur del Monte de las Cenizas, con 14 inmigrantes a bordo (11 varones, 1 mujer y 2 menores).

Asimismo, la Guardia Civil localizaba en la playa de El Portús a 16 extranjeros: 8 varones, 3 mujeres y 5 menores. Todos en aparente buen estado de salud.

«Solamente se encuentran allí estas 30 personas, a la espera de su salida hacia el programa de acogida del Ministerio de Migraciones», aseguraban desde la Delegación del Gobierno.

La UIP de la Policía vigila Escombreras, donde ayer continuaban 30 personas

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La finalidad es sacarlos en autobús de la dársena y repartirlos en pisos de organizaciones humanitarias, de la Región y otras provincias. Porque los recursos con los que cuentan organizaciones como Accem, Cruz Roja, Cepaim y Red Acoge, las encargadas de hacerse cargo de los migrantes una vez que llegan a la comunidad, están a tope. Las decenas de plazas que hay en la Región (solamente Cruz Roja tiene 80) se reparten especialmente en pisos particulares con los que cuentan las asociaciones, pero los mismos están ocupados. Tienen prioridad las familias con niños.

Desde la asociación Convivir Sin Racismo aseguraron ayer a este diario que tienen conocimiento de que la semana pasada fueron llevados al CIE de Valencia extranjeros llegados en patera al litoral de la Región, algo que la Delegación del Gobierno niega que se esté haciendo.

Según Convivir Sin Racismo, los migrantes elegidos para ser trasladados al CIE de Zapadores «siempre nos preguntan que por qué ellos». Escogerlos «es una lotería», destacan.

El Ayuntamiento de Cartagena presiona a Vélez para que acepte el traslado del CATE a la falda de Galeras

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A la pregunta de qué va a pasar con el Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) que se iba a hacer en Cartagena, desde el departamento de José Vélez indicaron este jueves que «no es un asunto propio de la Delegación», sino que se gestiona directamente desde los ministerios del Interior y de Defensa. Cabe recordar que en fue el organismo que dirige Margarita Robles el que cedió unos terrenos para hacer en la ciudad portuaria un centro que sigue sin ponerse en marcha.

A finales de 2020 ya se puso sobre la mesa que era urgente dejar de instalar un campamento en Escombreras para atender a las personas llegadas en patera al litoral de la Región y contar con un edificio habilitado para tal fin. Sin embargo, es verano de 2022 y no hay CATE a la vista, por lo que los migrantes siguen hacinados entre suciedad en los barracones.

El Pleno del Ayuntamiento de Cartagena, celebrado ayer, aprobaba una moción para instar a Vélez, a que «acepte públicamente los terrenos ofrecidos por La Armada, los terrenos de los antiguos depósitos que hay en la falda del monte Galeras, como ubicación definitiva para el CATE y a comenzar con urgencia el traslado de las instalaciones para su inmediata puesta en marcha».

Agentes que custodian la dársena afirman que la basura se sigue acumulando y que hay excrementos en el suelo

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La moción también expone que «en caso de que el delegado del Gobierno entienda como inadecuada la ubicación ofrecida, el Pleno le insta a explicar su negativa y a reiterar la invitación de julio de 2021 para que acuerde con los grupos municipales y las entidades e instituciones implicadas el lugar definitivo».

Asimismo, el Ayuntamiento «le recuerda a la Delegación del Gobierno su obligación de garantizar la acogida de inmigrantes en condiciones de seguridad y dignidad, y de proporcionar a la Policía Nacional los medios para realizar su trabajo».

En la dársena en cuestión, miembros de Cruz Roja atienden a los recién llegados, aunque no tienen permiso para acceder al recinto policial habilitado para que permanezcan. Se les hace la prueba del covid y pasan a disposición policial. En las instalaciones donde aguardan y pernoctan los migrantes, los extranjeros pugnan por conseguir un trocito de sombra y el suelo está lleno de suciedad, según se evidencia en las imágenes a las que ha tenido acceso este diario, y los agentes de la Policía Nacional que se ocupan de custodiar durante las 24 horas a estas personas han de lidiar, a la vez, con una plaga de roedores que, en los últimos días, proliferan por el puerto. Agentes que custodian la dársena afirman que la basura se sigue acumulando y que, aunque ponen retretes portátiles, hay heces en el suelo y se ven «ratas como conejos».

Si alguien tiene covid le entregan dos mascarillas y le aconsejan distancia

Desde la Consejería de Salud indicaron este jueves que a los extranjeros que llegan en patera a la Región se les sigue haciendo la prueba para ver si tienen coronavirus. Sin embargo, como la normativa al respecto ha cambiado, ya no hay que mandar al hospital a los contagiados ni obligar a hacer cuarentena a sus compañeros de barcaza.

En concreto, si uno de los inmigrantes da positivo en la prueba, se le entregan dos mascarillas FFP2, consideradas de las más seguras del mercado, detallan desde el departamento que dirige Juan José Pedreño.

Asimismo, «se le da educación sanitaria», apuntan desde la Consejería. En este sentido, a los extranjeros, con el amparo de un traductor, «se les explica que deben mantener la distancia de seguridad de dos metros y medio».

No obstante, dado que en el campamento ha habido estos días hasta más de un centenar de personas, la opción de mantenerse aislado ha sido difícil. Si una persona llegase enferma y con graves síntomas, por descontado que se le proporcionaría atención sanitaria inmediata.

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