Los efectos del temporal de las pasadas semanas han dejado un fuerte impacto en la costa. Tal es así que en el comienzo de la Semana Santa y, por tanto, del periodo vacacional, los ayuntamientos continúan acondicionando sus playas y retirando desperfectos. El Ayuntamiento de Cartagena comenzó sus trabajos de limpieza de playas en Cala Cortina, la playa de Levante de Cabo de Palos y las playas de la zona oeste. Durante todo el fin de semana, incluido el festivo de Viernes de Dolores, se trabajó en el resto de arenales de La Manga y de las playas del Mar Menor, «con equipos desplazados desde Cala del Pino hacia Mar de Cristal y desde este punto hasta Punta Brava para la retirada de la biomasa».
San Javier sigue sin tener disponible algunas playas en La Manga
Las labores de limpieza se llevan a cabo con medios humanos y materiales, y se ha dado prioridad a las zonas del Galúa y Entremares, donde es más necesaria la intervención sobre la arena por la pérdida de arena. Las labores se vienen centrando hasta ahora en la limpieza, aunque se tiene previsto comenzar a instalar infraestructuras turísticas como pasarelas y lavapiés, al tener que paralizar su instalación por el temporal de viento y oleaje.
San Javier continúa tratando los daños del temporal en las playas de La Manga mientras que San Pedro del Pinatar avanza en la instalación de las pasarelas de madera, los accesos para personas con movilidad reducida y nuevos aseos conectados al alcantarillado. «Casi todas las playas estarán operativas al baño durante esta Semana Santa, señalaba ayer el concejal de Turismo de San Javier, Antonio Martínez, que pide «comprensión por aquellas que no puedan estar operativas» tras el temporal, y solicita la ayuda a la Demarcación de Costas para la recuperación de las mismas. Águilas seguía este fin de semana mejorando sus playas, ya que el temporal llegó a barrer la arena de las playas en zonas más urbanas.
El Mojón vuelve a protestar por las inundaciones en ‘tierra de nadie’
La Plataforma Vecinal Stop Inundaciones volvió ayer a concentrarse frente al Ayuntamiento de San Pedro del Pinatar por los graves efectos que ocasionan las inundaciones en la pedanía ubicada en el límite de dos comunidades. «Por intereses urbanísticos y agrícolas, se han desviado los cauces de las aguas que vienen de los campos de cultivo», originando avenidas de agua que llegan a El Mojón, inundando calles y viviendas.
El emisario de Cala Reona acaba en Calblanque
La rotura del emisario de Cala Reona en Cabo de Palos por el fuerte temporal marítimo de la pasada semana ha ocasionado un problema serio a las administraciones. Ayer, varios de los trozos fragmentados acabaron varados en las playas de Calblanque. Los primeros cálculos realizados por el Ayuntamiento de Cartagena estiman que la rotura del emisario afecta a medio kilómetro de este, que se partió en varios fragmentos que poco a poco han ido apareciendo a lo largo de la costa cartagenera más cercana a Cabo de Palos.
El Ayuntamiento informó ayer que está procediendo a la retirada íntegra de los fragmentos y que está en contacto con la Comunidad para proceder a su restauración. Sin embargo, la pasada semana el Consistorio estimaba un gasto de cinco millones de euros para repararlo y entonces ni la Administración local, ni la regional ni el Estado querían hacerse cargo de estos trabajos. La rotura llegó a poner en alerta a Capitanía Marítima de Cartagena para garantizar la seguridad de las embarcaciones que recorren la zona. Ya en 2020 este emisario, que vierte agua tratada de la depuradora Cabo de Palos Sur, también sufrió una rotura por un temporal marítimo y tuvo que ser arreglado por la Entidad Regional de Saneamiento y Depuración de Aguas Residuales de la Región (Esamur).
