El presidente de la comunidad autónoma de Murcia, Fernando López Miras, ha pedido formalmente este lunes al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, una reunión en la que poder acordar una solución "justa, equitativa y permanente" que garantice el mantenimiento del trasvase Tajo-Segura.

López Miras ha enviado una carta a Sánchez en la que le pide que ese encuentro se celebre "en el menor plazo de tiempo posible", ya que el del agua es un "problema de Estado" que debe solucionarse, pero descartando la reducción de caudales a trasvasar propuesta por el Ejecutivo central en el nuevo Plan de Cuenca del Tajo.

"Resulta difícil de entender que un organismo dependiente del Gobierno de España como la Confederación Hidrográfica del Segura no ofrezca alternativa ni discrepancia alguna a las consecuencias asociadas a esta reducción" de 105 hectómetros anuales, apunta el presidente.

Según insiste en la misiva, esa reducción del trasvase supondrá, según estima la propia Confederación, "la inviabilidad productiva de 12.000 hectáreas, un impacto económico de 122 millones de euros y la pérdida de 5.000 empleos directos en las tres comunidades que reciben agua del trasvase Tajo-Segura".

Por eso, ha insistido en que la Región de Murcia no puede admitir esa medida y exige que se pongan todos los esfuerzos "en hacer posible una política hidrológica nacional que abogue por conciliar la sostenibilidad medioambiental y la protección de la naturaleza con el presente y futuro de miles de familias trabajadoras que no hacen sino contribuir, con su esfuerzo diario, a la riqueza y prosperidad de toda España".

El trasvase, ha insistido, da trabajos a más de 100.000 personas en toda la zona de Levante y "genera miles de millones de euros de ingresos en exportaciones y es un factor asegurado de prosperidad y riqueza".