La Confederación Hidrográfica del Segura también trabaja estos días en actualizar la cartografía de las zonas inundables, especialmente el mapa de riadas o flujos preferentes que tanta polémica ha causado en los ayuntamientos y entre los promotores inmobiliarios y constructores.

Una corrección que implicará «que algunas zonas dejen de estar consideradas» como tramos donde corre el agua a cierta velocidad aunque el presidente de la CHS, Mario Urrea, no precisó ayer qué porcentaje de los límites de los espacios inundables se redefinirá.

Estos nuevos mapas estarán en exposición pública en los próximos días y se prevé que contemplen las sucesivas obras contra avenidas que se han ido construyendo en los últimos años y que no estaban reflejadas en los mapas, según denunciaban los ayuntamientos.

La CHS ya garantizó a los constructores que todos los permisos se tramitarán y aprobarán dentro de los plazos y que las obras en municipios como Murcia no se paralizarán.