Los transportistas en huelga están extendiendo el bloqueo al resto del transporte y cada día salen menos camiones a las carreteras. El temor de las empresas a las actuaciones de los piquetes va dejando sin suministro a las empresas de todos los sectores, en las que empiezan a escasear las materias primas y los componentes necesarios para la elaboración de algunos productos. Incluso las obras están quedándose sin materiales de construcción después de cuatro días de paro.
Mientras tanto, continúan las protestas y este jueves volvió a quedar colapsada la circulación en la ciudad de Murcia con el paso de la caravana de camiones que recorrió las principales avenidas de la capital por la mañana.
También volvieron a repetirse los bloqueos en los polígonos industriales como el de Cabezo Beaza en Cartagena.
Las empresas del sector lácteo no están sufriendo en la Región los problemas que han llevado a parar la recogida de la leche en otras comunidades, según indicó el responsable de Ganadería de COAG, Vicente Carrión, aunque las industrias están dejando de recibir algunas materias primas necesarias para la elaboración de sus productos.
Las gasolineras dejan de ir a cargar a Escombreras, pese a la escolta de la Guardia Civil
Fuentes de la empresa El Torrejón de Totana apuntaron a La Opinión que se están quedando sin los ingredientes utilizados para producir la leche sin lactosa, por lo que prevén que dejarán de elaborarla.
También están faltando repuestos en algunas industrias y talleres, que están viendo agravadas con el paro del transporte la escasez de suministros a la que llevan meses enfrentándose a causa del colapso del tráfico marítimo.
Las empresas tienen más problemas para conseguir los productos que llegan de fuera de la Región, dado que el bloqueo está resultando más intenso en otras comunidades autónomas.
Aunque no hay problemas con la recogida de la leche, en la industria láctea falta algún ingrediente
También los exportadores tienen cada vez más dificultades para encontrar transportistas dispuestos a sacar sus productos, por lo que han frenado el ritmo de recolección, tal y como indicó el presidente de Proexport, Mariano Zapata.
Los efectos del paro se están dejando sentir también en la construcción, dado que el suministro de materiales a las empresas de este sector dependen en gran medida de los autónomos.
Las compañías que no secundan el paro tienen miedo a los daños que pueden sufrir sus camiones si tratan de sortear los piquetes, según indicó el presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio, José Baños, quien informó este jueves de que los camiones dedicados al transporte del combustible desde Cartagena están dejando de acudir a cargar a la antigua CLH (ahora Exolum), la empresa encargada de la distribución de la gasolina y el gasoil que sale de Repsol.
Baños asegura que, a pesar de que la Guardia Civil ha estado escoltando a los convoyes que salen desde Escombreras, los propietarios de las gasolineras prefieren abastecerse en el puerto de Alicante, donde no encuentran tantas dificultades para cargar sus cisternas.
Despliegue policial
El Ministerio del Interior anunció que ha dado instrucciones a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para desplegarse por todos los puntos de la red vial para proceder a identificar a aquellos ‘piqueteros’ que provocan incidentes por su participación en hechos ilícitos ocurridos en plataformas logísticas de bienes de primera necesidad, informa Europa Press.
En los últimos días se han producido numerosos incidentes en los bloqueos, que están agravando la tensión. En uno de estos incidentes en Cartagena una mujer que formaba parte de un piquete resultó lesionada y acabó denunciando al conductor.
También han dejado de llegar repuestos y los materiales de construcción se agotan en algunas obras
Por su parte, la patronal regional del transporte Froet hizo público un comunicado en el que dice que «entiende la postura de aquellos que han decidido parar, pero no creemos que sea la más efectiva en los momentos actuales que atraviesa el país». La Froet hace un llamamiento a la reflexión «porque lo único que se va a conseguir es el enfrentamiento entre los propios transportistas, como ya está ocurriendo, y eso justo es lo único que no puede ocurrir. Juntos tenemos más fuerza», recalca, al tiempo que condena «todos los actos violentos».
Defiende que «no hay que engañar a la gente que está desesperada» y dice que «pedir que se establezcan unos precios mínimos obligatorios es ilegal en una economía de mercado porque va en contra de la libre competencia, y no lo admitirá ni este gobierno, ni ningún otro ni la Unión Europea».
