Los murcianos siguen volcándose con los damnificados del conflicto bélico promovido por Putin. Una expedición impulsada por la Confederación Comarcal de Organizaciones Empresariales de Cartagena ( COEC) partía de Cartagena este martes y regresará en ocho días con 52 mujeres y niños de Ucrania. A la vez, la Universidad Católica San Antonio (UCAM) mandaba un camión de ayuda humanitaria a una universidad polaca y facilitará la llegada a la Región de Murcia de un grupo de refugiados.
«En esta acción humanitaria está colaborando activamente en la coordinación la empresa asociada a COEC, Mecanizados Arocam SL y su CEO José Antonio García Aroca, y cuenta con la colaboración de oenegés Coordinación Municipal Cartagena para Ucrania (Protección en Civil), Asociación de Ucranianos en Cartagena, ACCEM (Gestión de inmigración) Murcia y Cartagena, Cruz Roja, Presidencia de Murcia, Cáritas Diocesanas Murcia y Coordinación Cartagena y ACNUR», indicaban desde la COEC.
La UCAM manda un camión de ayuda humanitaria a una universidad polaca y facilitará la llegada a la Región de un grupo de refugiados
Son nueve los vehículos los que emprendían ayer este viaje cargados de alimentos como leche en polvo para niños, potitos, material desinfectante y otros alimentos no perecederos.
Por otro lado, alimentos no perecederos, ropa, pañales y diverso material de primera necesidad forman parte del envío que la Universidad Católica de Murcia, a través de su Plataforma Universitaria por la Paz, ha preparado para los refugiados de la guerra en Ucrania. El camión salía este martes hacia la Universidad de Katovice (Polonia), que será la encargada de canalizar la entrega de la ayuda. Este viaje humanitario, además, tiene una doble intención, ya que servirá para facilitar la llegada a Murcia de un grupo de refugiados, que serán alojados en la Región, informan desde la institución docente.
José Luis Mendoza, presidente de la UCAM, valoraba el trabajo que se está realizando desde la Plataforma y daba las gracias a todos los que están colaborando para ayudar «a todas las familias damnificadas a causa de esta terrible guerra que tantas muertes y daño está causando». «Como universidad católica siempre nos planteamos ayudar en la medida de nuestras posibilidades», hizo hincapié.
La parroquia del Espíritu Santo acoge a siete ucranianas
La parroquia del Espíritu Santo de Espinardo (Murcia) tiene acogidas a siete refugiadas ucranianas: dos madres (una de ellas con tres hijas y otra con una) y una mujer más. Llegaron el viernes y el sábado para instalarse en la casa parroquial, indica el Obispado.
El Miércoles de Ceniza la comunidad de base y la Asociación Murcia Acoge se pusieron en contacto con el párroco del Espíritu Santo, Antonio Sánchez, para solicitarle la acogida de refugiados de la guerra de Ucrania, a lo que este aceptó.
