Los hosteleros se quejan de que al aumento de los costes que soportan los establecimientos a consecuencia del encarecimiento de la factura energética y de las materias primas se suma también la subida de los precios de la cerveza provocada por la escasez de cereales. Según los cálculos del presidente de la Asociación de Bares de la patronal regional de hostelería Hoytú, José María Rubiales, el precio del barril se ha carecido en torno al 20% y alcanza en este momento los 125 o 130 euros. Destaca que este repunte coincide con la revisión del salario mínimo interprofesional, que se ha establecido en 1.000 euros mensuales, 35 más que el año anterior.
La cebada es el principal ingrediente que utilizan las fábricas de cervezas, junto con el lúpulo y otros cereales. La desaparición del suministro procedente de Ucrania ha provocado una escasez en otros sectores que dependen del grano, como las panaderías y las pastelerías, lo que ha dado lugar a un aumento de los precios anterior incluso al inicio de la guerra.
Ucrania ha sido hasta ahora el principal granero de Europa junto con Rusia, por lo que desde la Unión Europea se intenta buscar proveedores alternativos en países como Estados Unidos, Canadá o Argentina, sobre todo para garantizar la alimentación del ganado.
José María Rubiales calcula que el conflicto bélico ha dado lugar a una subida del precio del barril de unos 15 o 20 euros, que supone en torno al 20%.
Por otra parte, fuentes de Estrella de Levante han precisado que la compañía murciana ha incrementado sus precios solo un 6%, aunque este aumento queda reducido a la mitad para la mayoría de los clientes debido a los descuentos que les aplica, a pesar del encarecimiento del coste del transporte y del combustible.
La compañía de Espinardo sostiene que la cebada y los demás cereales utilizados en su fábrica proceden del Noroeste de la Región y de la provincia de Albacete, mientras que el lúpulo lo trae de León.
El presidente de la Asociación de Bares recuerda que también ha subido la energía y el salario mínimo
No obstante, reconoce que, aunque no compra a Ucrania, «la escasez del mercado puede provocar cambios».
El presidente de la Asociación de Bares se lamenta de que, antes de haber superado las dificultades creadas por la pandemia, los establecimientos de hostelería están sufriendo las consecuencias de todos los problemas que se producen en el resto de los sectores productivos, como el amarre de la flota pesquera que han acordado las cofradías de la Región ante el elevado precio del gasoil o el encarecimiento de los piensos destinados a la alimentación del ganado.
El patrón mayor de la Cofradía de Águilas, Manuel Díaz, ha advertido de que previsiblemente pararán también las flotas pesqueras del resto de comunidades autónomas, lo que puede dejar desabastecidos de pescado y marisco nacionales a los bares y a las pescaderías para Semana Santa.
José María Rubiales sostiene que los bares y restaurantes también empiezan a tener problemas con el suministro de la carne, dado que los ganaderos han reducido el número de animales en sus granjas para tratar de contener el gasto de las explotaciones.
Estrella de Levante dice que consume cereales de la Región y de la provincia de Albacete y solo ha subido un 6%
De hecho, el responsable de Ganadería de COAG también ha advertido de que optarán por sacrificar animales si la escasez de cereales y la sequía impiden que puedan mantenerlos.
Rubiales asegura que los hosteleros tienen la sensación de que «toda la materia prima que empleamos es como los productos perecederos, que suben de precio de un día para otro» y pueden aparecer o desaparecer del mercado. No obstante, defiende que los empresarios son «muy versátiles» y se adaptarán a las circunstancias en la medida de lo posible, aunque no haya «ni anchoas» para las marineras.
Destaca igualmente que los empresarios están pagando la luz un 40% más cara y que también han tenido que asumir la subida del salario mínimo interprofesional, que ha situado el sueldo de los camareros y de los cocineros en 1.000 euros mensuales.
Hoy estaba previsto que se reuniera la mesa de negociación del convenio colectivo de la hostelería, pero la reunión ha vuelto a ser aplazada para la semana próxima. Patronal y sindicatos iniciaron las negociaciones antes de que empezara la pandemia, pero no han conseguido alcanzar un acuerdo que permita sustituir el pacto firmado en 2008.
"Los autónomos, otra vez en pánico" ante la nueva crisis, según UPTA
UPTA asegura que «los autónomos están otra vez en pánico con la incesante subida de precios de los combustibles y de la electricidad» y la situación que ha provocado la invasión de Ucrania por parte de Rusia. «Cafeterías, restaurantes, pequeño comercio, transporte de mercancías o de viajeros, taxis, profesionales de la construcción, servicios profesionales, entre otros. Nadie escapa», indica el presidente de la organización, Eduardo Abad, en un comunicado. Recuerda que «aún no hemos salido de la situación económica producida por la covid y ya nos encontramos con una nueva crisis económica». Reclama una reunión urgente con el Ministerio de Economía y sostiene que «debemos adelantarnos a los cierres y a miles de bajas en el RETA».
