La cuenca del Segura es la única demarcación hidrográfica de España que a día de hoy está registrando problemas urbanísticos por un mapa de riadas que llegó cuatro años después de aprobarse la reforma del Reglamento de Dominio Público Hidráulico de 2016 que impone restricciones sobre las zonas marcadas como inundables o en riesgo de sufrir avenidas. Para desbloquear la situación, el Ministerio para la Transición Ecológica, en concreto la Dirección General del Agua con Teodoro Estrela al frente, ha tenido su primera reunión con la Federación de Municipios de la Región de Murcia con el objetivo de dar salida a las exigencias de los ayuntamientos más afectados por la nueva cartografía.
Tras poner encima de la mesa los detalles y las demandas, el Ministerio abre la puerta a actualizar el mapa de riadas que se publicó en febrero de 2021, y que según los consistorios presenta varias deficiencias, entre ellas que no recoge las nuevas infraestructuras contra inundaciones o avenidas que se han llevado a cabo en los últimos años. Estrela, según fuentes presentes en la reunión, ve razonable abordar una revisión de la cartografía, que de hacerse podría llegar a corregir un 15% de los límites geográficos marcados en el nuevo mapa para algunos municipios, por ejemplo el de Murcia.
El Ministerio está en plena revisión del Reglamento de Dominio Público Hidráulico, algo que facilitaría dos de las demandas que tienen los consistorios más afectados por el mapa de riadas. Una de ellas es establecer un plazo transitorio en la norma aprobada hace cuatro años para que esas limitaciones que plantea, como la prohibición de construir determinadas edificaciones en suelo afectado por posibles avenidas, no tuvieran validez hasta que estuviera publicado el mapa. Es decir, que esa norma no tenga valor jurídico en la demarcación del Segura hasta febrero de 2021, cuando la Confederación Hidrográfica dio a conocer la cartografía.
Otra de las demandas es añadir una nueva disposición transitoria a ese reglamento para que proyectos urbanísticos con licencia municipal que ya se encuentran en avanzado estado de construcción no se vean paralizados por el mapa de riadas. En este punto, de no plantear una solución habría casos concretos donde los promotores, que ya han construido sobre suelo consolidado que pasó de rural a urbano tras las modificaciones oportunas en los planes parciales, podrían exigir reclamaciones millonarias a los ayuntamientos y la Confederación. Para ello, los municipios piden ese matiz en el reglamento para aclarar "el régimen de aplicación" de las limitaciones que plantea para estas zonas.
Los ayuntamientos tienen claro que la CHS en este caso "no ha seguido los pasos" necesarios para haber publicado esta cartografía tras entrar en vigor las limitaciones sobre estos terrenos a comienzos de 2017. Ahora los consistorios demandan que el organismo de cuenca cuente con ellos para redibujar de nuevo el mapa de riadas, contando con todas las obras que se han hecho en los últimos años para frenar la velocidad del agua en espacios urbanos. Estas reclamaciones al Ministerio ayudarían a desbloquear el 80% de los proyectos urbanísticos afectados por la cartografía de zonas inundables en los municipios murcianos.
Nueva reunión en menos de un mes
Municipios como Murcia, Santomera o Beniel se ven gravemente afectados por el mapa de riadas, y otros de forma parcial como Cartagena o Lorca. "Al Ministerio le hemos hecho una foto fija de que cuáles son los problemas que tienen los municipios ahora mismo con esta cartografía. Ellos parece que ven razonable las demandas, les gusta la música, pero tienen que estudiar todavía la letra", ejemplifica Manuel Pato, secretario general de la Federación. Estrela se ha comprometido a estudiar a fondo las demandas locales y espera poder dar una respuesta en no más de un mes.
