Desde ayer hasta el próximo 13 de febrero el Ayuntamiento de Murcia celebra la Feria de Economía Circular, la primera que se celebra en la Región y una de las pocas que se celebran en España sobre este modelo de consumo. Una semana de debate y reflexión con el objetivo de que empresarios y ciudadanos murcianos "formen parte del movimiento sostenible".

Artesanía murciana, sostenibilidad real y reivindicación, esos son los tres pilares en los que Chi-Chi dice sustentarse. Esta empresa murciana no es solo una marca de compresas de tela, sino todo un movimiento revolucionario que apuesta por la sostenibilidad.

LOOP, la Feria de Economía Circular, no ha querido perderse esta propuesta. Por eso, Chi-Chi estará presenta este martes, a las 18.15, en el Cuartel de Artillería, donde mostrarán las diferentes "alternativas para una menstruación sostenible". Maina Hervás (28 años) y Agustín Bonus (32 años), co-fundadores de esta empresa murciana, serán los encargados de demostrar cómo con un cambio de hábito puede "cambiar las reglas".

Y nunca mejor dicho. Desde que en 2018 Maina Hervás se interesara por productos menstruales y sostenibles comenzó a transformar el mundo de la menstruación y todos sus tabúes. Como cuenta al periódico, la idea nació cuando se sintió incómoda con el uso de la copa menstrual, un producto de menstruación sostenible. Buscando en Internet otras alternativas, encontró las compresas de tela y pensó que serían muy buena opción. "En casa siempre se ha cosido", afirma Maina, por lo que comenzó a confeccionar ella misma las que serían las primeras compresas de tela de Chi-Chi.

Dio un salto más, pasó al mundo de las redes sociales y formalizó su marca Made in Maina, que le brindó la oportunidad de visualizar su, por aquel entonces, pequeño proyecto "feminista y sostenible". En 2021, tras una mala racha, se cruzó en su camino Agustín Bonus, que quedó encantado con la idea de Maina.

Así es como nació Chi-Chi, un proyecto que tiene el objetivo principal de colaborar con el medio ambiente y "normalizar la sangre" haciendo que las personas se conozcan mejor y mejoren "la relación con uno mismo y con su menstruación" como bien dicen en su página web.

Aunque Maina afirma que es un proyecto muy complicado por los "duros tabúes" que hay sobre la menstruación, es consciente de que "el mundo está interesado" en esta nueva forma de vivir la menstruación y espera seguir progresando.

Actualmente, la mayoría de sus ingresos los obtienen a través de su tienda online, aunque disponen de dos puntos de venta físicos en la Región, La Morada Verde y Cuasimoda. Entre su gama de productos disponen de compresas de tela, confeccionadas en talleres murcianos, y bolsas para guardarlas y transportarlas. Además, cuentan con ropa interior, copas menstruales y jabones fabricados en España.

Compresas de tela de la marca Chi-Chi @chi_chi.es

En LOOP, Maina asegura que su principal objetivo es mostrar las alternativas sostenibles y su eficacia, para conocerlas mejor, teniendo en cuenta sus pros y sus contras y cómo deben usarse.

#túponeslasreglas

Puesto el foco en normalizar la menstruación y romper con lo tabúes, Chi-Chi quiere movilizar a las personas con el fin de cambiar las reglas. Un juego de palabras que resumen la reivindicación que Maina, ahora de la mano de Agustín, lleva años promulgando.

Y es que el elevado coste de los productos de higiene íntima, los anuncios en los que la sangre se representa con un líquido azul -muy alejado de la densidad y color característico de esta- entre otras cosas, reflejan lo opuesto a una sociedad modernizada, capaz de aceptar que la regla es un hecho, una realidad que viven las mujeres durante muchos años a lo largo de su vida.

Responsables con las personas y el medio ambiente

Teniendo en cuenta, como ellos mismos afirman, que en los últimos 50 años se han acumulado 20 billones de compresas y tampones que tardarán 800 años en descomponerse, Chi-Chi cambia las reglas con una propuesta económica -ya que una compresa de tela dura hasta 5 años- y ecológica -porque reduce la huella de co2 y ahorra energía y recursos al planeta- a través de sus compresas de tela, ahorrando 250 compresas o tampones desechables. "No tiene sentido proponer alternativas que no sean responsables con las personas y el medio ambiente". Estos dos jóvenes y lo tienen claro y vienen pisando fuerte.