La naturaleza vuelve a aliarse con los agricultores. Los embalses de la cabecera del Tajo, Entrepeñas y Buendía, han ganado esta semana 5,19 hm y almacenan actualmente un total de 653,35 hm, lo que supone el 25,94%, que asciende a 2.518 hm - pero suaviza la situación de los regantes que al menos hasta mayo van a ver relajada su dependencia del agua desalada, ya que el Ministerio para la Transición Ecológica va a tener que trasvasar un total de 108 hm de agua que se suman a los 40 hm que se almacenan actualmente en los embalses de la cuenca del Segura. Agua que se pagará a 0,20 euros/m y no a los 0,80 euros en los que está ya el caudal que se produce en Torrevieja, revisable a final de año. Esta coyuntura positiva no frena las movilizaciones contra los recortes del trasvase, ya que en primavera está previsto que se apruebe el plan hidrológico de la cuenca del Tajo que tiene plasmado negro sobre blanco el aumento de caudales ecológicos.
Los regantes del trasvase Tajo-Segura aseguran que la planta de Torrevieja está funcionando en las últimas semanas a medio gas por la falta de demanda, pero siguen las presiones de las comunidades para que compren agua. «Se ha reducido el consumo de caudal desalado porque a los precios que se está poniendo casi compensa más dejar de cultivar», subrayan regantes del Tajo-Segura.
Los regantes quieren dar el próximo 16 de febrero en Murcia el primer golpe sobre la mesa del año en la manifestación. Reclaman, como mínimo, que el precio del agua desalada no pase de los 0,3 euros/m, medio euro menos que el fijado por Acuamed ya para este primer trimestre del año en el que, gracia a las lluvias, se comprará menos agua desalada.
El embalse de Entrepeñas ha ganado 2,17 hectómetros cúbicos en los últimos siete días y almacena 253 de los 813 hm que puede embalsar, mientras que el de Buendía ha ampliado 3,02 y almacena 400,86 de los 1.705 hm que puede contener.
Una coyuntura que tranquiliza un poco el ambiente en un sector agrícola que está contra las cuerdas en este comienzo de enero, pues a la subida de la electricidad, un 30%, que se ha trasladado ya al agua, se suma el encarecimiento de fertilizantes y, por ejemplo, los plásticos que se utilizan en los invernaderos.
El Ministerio para la Transición Ecológica tiene cerrado hasta el 13 de febrero el trasvase Tajo-Segura dejando pendientes de trasvasar unos 55 hm de agua correspondientes al envío de este mes de enero (27 hm) y a los cerca de 28 hm que faltan por llegar desde que se reabriera el acueducto a mediados de diciembre. Solo un mes después, vuelta al cierre, esta vez por una obras de mantenimiento del postrasvase en Molina de Segura. De momento, no habrá problemas de suministro gracias al caudal almacenado en los embalses de Crevillent y La Pedrera, pero vuelve la alarma en el campo, debido a que los plazos nunca se cumplen. La Confederación Hidrográfica del Segura ha iniciado los trabajos de reparación y acondicionamiento del falso túnel de los Valientes en el Canal Principal de la Margen Izquierda del postrasvase Tajo-Segura. El presupuesto de las actuaciones asciende a 1,8 millones y su duración será de, aproximadamente, diez meses.
Acuamed no cede e insiste en fijar una tarifa del agua desalada que cuadruplica la del trasvase desde el Tajo
Recordar, por otro lado, que Acuamed ha enviado un escrito en el que traslada a los regantes que el precio para este año es de 0,81 euros/m y, además, se revisará al alza al final del año hidrológico para aplicarle con carácter retroactivo la subida correspondiente debido al imparable incremento de los costes energéticos. El motivo, según advierte Acuamed, es que el precio de 0,81 euros/m (cuatriplica la del Tajo) se ha calculado en base a una tarifa eléctrica de 87,55 euros el megavatio/hora, y ahora mismo ésta ha subido a los 125,81 euros, un 44% más cara. Con lo cual, y según alertan los regantes, el precio final de ese caudal será de 1,14 euros/m para este primer trimestre cuando en octubre se realicen las correcciones oportunas. La subida de la tarifa eléctrica disparará el agua desalada para riego, incluso, según los cálculos más pesimistas, a los 1,3 euros/m este año condenando a la desaparición a cientos de agricultores, según ha advertido el Sindicato de Regantes del Tajo Segura.
