En un contexto actual donde la sociedad y la clase política está poniendo el foco en la escolarización de los niños de 0 a 3 años y la creación de plazas públicas para animar con una oferta gratuita unas cifras de matriculación muy bajas en la Región, el sistema de becas para este fin ha vuelto a fracasar. La convocatoria de ayudas que cada año se publica para subvencionar la matrícula del alumno del curso anterior ha tenido un resultado negativo: solo dos becas han sido concedidas por la Consejería de Educación para el año escolar 2020/2021.

La partida presupuestaria que cada año guarda la Comunidad para estas subvenciones asciende a 500.000 euros, se ha mantenido congelado en las últimas cuentas anuales. Su destino son los alumnos de escuelas infantiles privadas o municipales que tengan de 0 a 3 años. Esas dos becas concedidas, porque cumplen los requisitos mínimos que establece la convocatoria, suman un total de 1.885 euros. Es decir, Educación deja sin repartir en la oferta de ayudas para pagar la matrícula del curso pasado 498.115 euros.

En un principio, en la convocatoria que se publicó el pasado mes de septiembre para conceder ayudas para el curso anterior, Educación recibió solo 85 solicitudes. En el primer cribado solo 38 peticiones siguieron adelante pero por problemas derivados de la renta que presentan los miembros de la familia, al final solo quedaron concedidas y aprobadas dos ayudas por un importe de 1.000 y otra de 885 euros a dos niños murcianos. El máximo que cada alumno podía recibir eran mil euros para los conceptos de «custodia, alimentación y vestuario de uso exclusivo escolar». Los beneficiarios son dos alumnos de dos centros concertados de Murcia y Archena.

La tasa de matriculación más baja de España

Las escuelas municipales públicas y los puntos y centros de atención a la infancia (PAI y CAI) ofertan poco más de 9.000 plazas en la Región de Murcia. Una oferta pública insuficiente para una población infantil de 0 a 3 años de menos de 60.000 niños. La tasa de escolarización es baja en la comunidad, un 17,8%, la más baja del país por comunidades autónomas. La gran mayoría de plazas las ofertan escuelas privadas-concertadas que llegan de padecer la crisis del coronavirus, donde han llegado a perder más del 50% de los alumnos matriculados, y también del descenso en la natalidad que afecta a todas las comunidades. La consejera de Educación, María Isabel Campuzano, abogó tras ser nombrada titular de este departamento en abril del pasado año por implantar el cheque escolar, una medida que ha ido perdiendo fuerza.

Según publicó la propia Consejería en septiembre, en una nota de prensa, «la Comunidad contribuye de esta forma a facilitar el acceso a la Educación Infantil a niños de 0 a 3 años, y además, promueve la conciliación de la vida laboral y familiar cuando el progenitor o progenitores trabajan tanto dentro como fuera del domicilio familiar».

El motivo de por qué falla entonces el sistema de becas se debe, según fuentes del entorno de las escuelas infantiles consultadas, a varios factores. Pese a que hace dos años la Consejería, siendo titular del departamento Esperanza Moreno, modificó los umbrales de renta para acceder a algunas becas como las ayudas al estudio para alumnos de Primaria y Secundaria, el problema puede estar aquí todavía, con una dificultad al superar los ingresos familiares los máximos exigidos para acceder a las becas.

La falta de información, los umbrales de renta más la burocracia son obstáculos para acceder a estas ayudas

Otro es la falta de información, algo a lo que apuntan muchas escuelas infantiles privadas y municipales. La Consejería señaló que las familias interesadas podrían dirigirse a las escuelas infantiles donde asisten sus hijos para obtener más información, así como a las oficinas del servicio de atención al ciudadano de la Comunidad Autónoma y al Servicio de Promoción Educativa de la Consejería de Educación y Cultura mediante un correo electrónico.

Potenciar el 0 a 3 años

Estas ayudas están destinadas a familias en una situación económica complicada y en este perfil encajan padres e hijos inmigrantes que «se pierden en un mar de burocracia y papeleo, que no se enteran de los plazos de la convocatoria o no se les informa debidamente. Llegan a temer incluso que si les conceden esta ayuda podrían perder otras», señala Clara García, portavoz de la FAPA RM Juan González.

La Consejería pretendía favorecer «la conciliación de la vida laboral y familiar» con estas subvenciones

Además, hay que tener en cuenta que las ayudas se conceden a curso vencido y que las familias deben afrontar con un año de antelación la matrícula de sus hijos en las escuelas cuando la resolución de estas becas se hace firme a mitad del curso siguiente.

Más allá de las bonificaciones municipales para acceder a las plazas públicas, el contexto educativo actual va encaminado a favorecer la escolarización de los menores de 3 años en escuelas públicas. De los fondos de recuperación europeos llegarán en los próximos cuatro años 40 millones de euros para crear casi 4.000 plazas públicas en la Región de Murcia. La gestión de este dinero correrá a cargo de la Consejería, que en un principio plantea subvencionar plazas en escuelas municipales o centros de atención a la infancia, al tiempo que buscará crear aulas de 2 a 3 años en los colegios de la comunidad, un hecho al que aspiran más de 100 centros.