Las comunidades de regantes de Lorca, Águilas, Puerto Lumbreras, Totana, Alhama de Murcia y Pulpí (Almería) han constituido una comunidad general de regantes para coordinar y optimizar el aprovechamiento del agua desalada de la planta desalinizadora Águilas-Guadalentín, de la que todas estas entidades son usuarias.

Entre todas ellas suman una superficie regable aproximada de 60.000 hectáreas y agrupan a más de 35.000 regantes particulares y empresas, según informaron ayer desde el nuevo organismo constituido, en el que estará al frente el actual presidente de los regantes del municipio de Lorca, Juan Marín.

«La necesidad de proteger los escasos recursos hídricos de la zona, así como la de optimizar la operatividad de la producción de agua desalada se ha convertido en una inquietud común».

Una inquietud común que ha llevado tanto a los usuarios como a los propios regantes de la planta desalinizadora de Águilas-Guadalentín a constituirse como una nueva comunidad general de riego.

La comunidad general suma una superficie regable de 60.000 hectáreas y agrupa a 35.000 particulares y empresas

Formar parte de esa asociación tienene varias ventajas.

En primer lugar, les permitirá contar con un órgano de gobierno con representación jurídica ante todos los organismos privados, así como ante las administraciones públicas, que salga en defensa de los objetivos comunes a todos los constituyentes en cuanto al agua desalada se refiere.

En segundo lugar, servirá, asimismo, para aunar los diversos esfuerzos de los constituyentes. También para promover y coordinar soluciones comunes, pues una de sus funciones será la de hacer de mediadora en todos los pactos y acuerdos a realizar. A la hora de desempeñar esta función, la asociación defenderá los intereses de todas y cada una de las entidades integradas en la misma, partiendo de una serie de principios que se resumen en los sigientes: autonomía, respeto mutuo de sus derechos y solidaridad entre sus miembros.