Tres líneas de actuación son las que por el momento la Consejería de Educación maneja para invertir los 40 millones de euros enviados por el Ministerio hasta 2023 y que tienen como objetivo crear casi 4.000 plazas públicas de 0 a 3 años en la Región de Murcia. Por un lado, el departamento de María Isabel Campuzano ya se está reuniendo con dirigentes de las corporaciones municipales para planificar convenios que impliquen más plazas en escuelas municipales infantiles y centros o puntos de atención a la infancia (CAI y PAI) que puedan ser autorizados para impartir el primer ciclo de Infantil. En la comunidad se ofrecen 4.400 plazas en este tipo de instalaciones pensados como servicios de conciliación pero no entran en los planes de Educación subvencionar todas esas plazas.

Por otro, la Consejería calcula que 117 colegios de la Región de Murcia podrán crear aulas de 2 a 3 años, en municipios donde sea necesario por el crecimiento vegetativo de la población y no existan escuelas dependientes del ayuntamiento o la Comunidad o que no dispongan de otras infraestructuras o de terrenos para construir nuevos centros. La nueva ley de educación Lomloe quiere potenciar estas aulas en los centros de Infantil y Primaria. Por último, Educación baraja construir nuevas escuelas infantiles de tres o seis unidades en terrenos municipales disponibles y que dependan de la Comunidad (solo 14 centros son gestionados por la Consejería). La preocupación de los ayuntamientos es qué ocurrirá con los gastos de personal extra o complementarios que impliquen la creación de estas plazas, algo a lo que todavía no se ha dado una respuesta.

En el aire queda la petición de Campuzano de poder invertir esos fondos en concertar plazas de centros privados. En la última Conferencia Sectorial de Educación entre el Ministerio y las comunidades, varias de ellas solicitaron que el departamento de la ministra Pilar Alegría consulte este tema a Europa, de donde proceden los fondos de recuperación.

Estas líneas de trabajo para Infantil vienen recogidas en la memoria del proyecto de ley de los Presupuestos regionales para 2022, donde Educación tendrá 1.445 millones de euros, unas cuentas que aumentan casi un 4%. La Consejería muestra sus ejes estratégicos para el próximo año: Lenguas Extranjeras, Atención a la Diversidad, Formación Profesional y Recursos Humanos, sumado a los nuevos currículos para Primaria y Secundaria pendientes de aprobar por el Ministerio y de desarrollar la parte autonómica por la Comunidad.

Del total de las cuentas, mil millones se destinarán para cubrir el gasto en personal, que aumenta levemente con respecto a las cuentas de este año pero cuya subida está motivada por el aumento del 2% en los salarios de los funcionarios y por las nuevas contrataciones derivadas de las oposiciones de maestro.

65 millones en inversiones

El apartado que sí crece son las inversiones, que llegan a los 65 millones de euros doblando al de 2021. En las nuevas infraestructuras o ampliaciones de las ya existentes, la Consejería sigue presupuestando dinero para nuevos centros como el instituto Valle de Leyva de Alhama (3,85 millones), el de La Aljorra en Cartagena (dos millones), colegio Sagrado Corazón en Librilla (2,8 millones) o el pabellón de Infantil del CEIP Martínez Abellán de Pliego ( 309.000 euros). Sigue pendiente la ampliación del IES Mar Menor de San Javier o el gimnasio del instituto María Cegarra de La Unión. El nuevo centro integrado de Formación Profesional Hespérides de Cartagena tendrá una financiación básica de casi 200.000 para comenzar el proyecto.

El director general de Centros Educativos e Infraestructuras, Jesús Pellicer, destaca que habrá 32 líneas de actuación con 27 millones destinados a inversión que se centrarán sobre todo en los centros educativos del sur de la Región, donde crece la escolarización por la población migrante y el crecimiento vegetativo. La retirada de amianto en once centros y la instalación de placas solares o remodelación de otras infraestructuras para apuntar hacia la eficiencia energética también tienen su reflejo en las cuentas. «Habrá siete millones para el plan de rehabilitación integral de edificios públicos».

Las ayudas para el comedor escolar y transporte contarán con cuatro millones, mientras que las subvenciones para libros y material escolar, junto con la financiación de la gratuidad de los tomos escolares en varios cursos de Primaria y Secundaria contará con casi 7 millones de euros. Pellicer señala a este periódico que los cambios en los currículos de Primaria y Secundaria se tendrán en cuenta en la adquisición de nuevos materiales, que no tendrán que priorizar los libros como apoyo principal sino como elementos complementarios. Por otro lado, el presupuesto que tendrán los colegios e institutos para gastos se congela, como lleva sucediendo desde hace años, mientras que la subvención a centros concertados se mantiene más o menos igual.