La Región de Murcia registra el tercer peor indicador multidimensional de Calidad de Vida (IMCV) por comunidades autónomas en 2020, solo por detrás de Andalucía y Canarias, según los datos facilitados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Este indicador, que abarca el periodo 2008-2020, está compuesto por nueve dimensiones que agrupan un total de 55 indicadores, actualizándose cada año 34 de esos indicadores, referentes a condiciones materiales de vida; trabajo; salud; educación; ocio y relaciones sociales; seguridad física y personal; gobernanza y derechos básicos; entorno y medioambiente y experiencia general de la vida.
Según los datos del IMCV, la calidad de vida en España descendió en 2020, año marcado por la pandemia de coronavirus, tras haber crecido ininterrumpidamente desde 2014, situándose en 101,71 puntos, frente a los 102,06 del año 2019.
En la misma situación se encuentran todas las comunidades y ciudades autónomas, que también sufrieron retrocesos en 2020, que, en el caso de la Región de Murcia, pasó de un indicador de 100,22 en 2019 a 99,87 en 2020, solo por detrás de Ceuta (97,37), Andalucía (98,55) y Canarias (99,05).
Con respecto a los años 2018 y 2019, la comunidad murciana mejora una posición en el listado, ya que supera a Canarias, una de las comunidades que, por el peso del turismo en su PIB, resultó más afectada por los efectos socioeconómicos de la pandemia de covid.
De las nueve dimensiones, la Región de Murcia solo está por encima de la media nacional en gobernanza y derechos básicos, donde es la cuarta autonomía con mejor indicador. Sin embargo, es la peor comunidad o ciudad autónoma en salud y la penúltima en ocio y relaciones sociales.
También registra peores indicadores que la media nacional en condiciones materiales de vida; trabajo; educación; seguridad física y personal; entorno y medioambiente y experiencia general de la vida.
Navarra, La Rioja y Aragón, donde hubo mejor calidad de vida
Por comunidades autónomas, y tomando conjuntamente las nueve dimensiones del modelo de calidad de vida, Navarra, La Rioja y Aragón presentaron los niveles más elevados de calidad de vida en el año 2020, mientras que los registros más bajos se dieron en Andalucía, Canarias y Región de Murcia.
En España, los descensos más acusados se dieron en salud, entorno y medioambiente y condiciones materiales de vida, sobre todo debido a la disminución de la esperanza de vida por la pandemia de Covid-19, así como al empeoramiento de indicadores subjetivos (como la población que sufre problemas por ruidos exteriores a la vivienda) o el incremento en el número de hogares en carencia material severa.
Por el contrario, en 2020 mejoraron los indicadores de trabajo, educación y seguridad, quedando sin actualizar el ocio y relaciones sociales, gobernanza y derechos básicos y experiencia general de la vida, dado que se construyen a partir de indicadores que no se obtienen todos los años.
Si se analizan las nueve dimensiones por separado, País Vasco destaca en tres de ellas (condiciones materiales de vida, trabajo y educación), Navarra en salud y entorno y medioambiente, Cantabria en ocio y relaciones sociales y seguridad física y personal y Baleares en gobernanza y derechos básicos y experiencia general de la vida.
