El agua del canal de Marchamalo, que conecta el Mar Menor con el mar Mediterráneo, ha cogido un tono azul en la mañana de este martes debido a un vertido de pintura procedente de las obras de repintado del carril bici de La Manga que lleva a cabo la Consejería de Fomento. Los vecinos han denunciado que el vertido de esta pintura ha teñido de azul el agua del canal y que los operarios de limpieza del Ayuntamiento de Cartagena, personados esta mañana en la zona, no han evitado estas escorrentías.
El Consistorio ha señalado que estas obras de pintado del carril para bicicletas, que se llevaron a cabo ayer, se han visto afectadas por la escasa lluvia caída en la zona, entre ayer y esta mañana, que ha provocado charcos teñidos de azul al no estar seca por completo la pintura. Esto ha acabado originando en un vertido al agua de la gola. El vertido ha provocado que la mancha se extendiera a lo largo del canal, debido al flujo de agua que entra y sale de esta conexión entre dos mares.
Los problemas con la pintura azul empleada para marcar el recorrido del carril bici ha sido objeto ya de críticas por parte de los vecinos de La Manga este mismo verano. La mala calidad de la pintura, denuncian, se ha unido a las lluvias y la falta de previsión meteorológica por parte de la empresa encargada de las obras ha acabado derivando en un nuevo punto de contaminación a la laguna.
La Consejería de Fomento asegura que la pintura empleada en el carril se ha escurrido debido a la lluvia inesperada que caía en el momento en el que se actuaba en ese tramo de La Manga. "La junta de dilatación del puente no estaba sellada y se ha filtrado por ahí. Rápidamente se ha actuado echando arena para detener la filtración y se ha parado de pintar", señalan desde el departamento del Gobierno regional, que califican los sucedido como "un arrastre de pluviales que ha sido solucionado a la mayor brevedad" y no como un vertido.
