El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Mario Urrea, comunicó ayer las actuaciones previstas por la Administración General del Estado en el programa de medidas del Plan Hidrológico de cuenca 2022-2027, que suponen una inversión de 1.015 millones de euros. Urrea hizo estas declaraciones tras reunirse con la Asociación de Empresas Consultoras de Ingeniería Civil de la Región de Murcia, encabezados por su presidente, Norberto Guillén, acompañado por varios miembros de su Junta de Gobierno.

El presidente les trasladó las actuaciones del Estado en el Plan Hidrológico de cuenca, que incluyen aquellas que se van a financiar con cargo al Plan de recuperación, transformación y resiliencia. Urrea señaló que estas actuaciones «se van a convertir en una palanca importante de activación de la economía en el sureste y, en particular, en el sector de la consultoría, que podrá liderar la redacción de los proyectos tanto de las denominadas infraestructuras grises como las infraestructuras verdes, estas últimas constitutivas de una parte importante del citado Plan a financiar con fondos europeos».

El total de las medidas incluidas en el Plan en el ámbito de la Administración General del Estado ascienden a un importe total de 1.035 millones de euros, que se distribuyen en cinco bloques.

En concreto, hay un bloque de atención a las demandas con un importe de 514 millones de euros; otro de abastecimiento con un importe de 200 millones de euros; un tercer bloque de prevención de avenidas por un total de 188 millones de euros; el cuarto de restauración del bosque de riberas y actuaciones de corrección hidrológica forestal con un total 77 millones; y otro de saneamiento y depuración con un total de 36 millones de euros.

Para acometer ese presupuesto, el presidente de la CHS puso de manifiesto la necesidad de que las empresas de consultoría que conforman el tejido productivo estén preparadas «con suficientes medios personales y técnicos que posibiliten ser los redactores de los proyectos y partícipes en las direcciones de obra, lo cual exigirá una adaptación en un muy corto plazo, dado los exigentes plazos a cumplir». Además, recordó el «importante nivel de inversión previsto en la cuenca del Segura para los próximos años, que refleja el fuerte compromiso del Gobierno de España para con este territorio».

En concreto, destacó que aporta «recursos presupuestarios para alcanzar los objetivos medioambientales de la Directiva Marco del Agua, para satisfacer adecuadamente las demandas de los usuarios de la cuenca de manera compatible con aquellos y, como no puede ser de otra manera, dotar al territorio de una menor vulnerabilidad frente al riesgo de inundaciones, que tan gravísimos daños vienen produciéndose desde 2016 y que tuvo su máximo y más dramático exponente en la DANA de 2019».