Solo el 10% de los desplazamientos motorizados en la Región de Murcia se hacen en transporte público, según los datos que ha expuesto el consejero de Fomento e Infraestructuras, José Ramón Díez de Revenga, que ha lamentado el "gran desajuste" existente entre "las necesidades de los ciudadanos y la oferta de transporte".

Díez de Revenga ha comparecido este miércoles a petición propia ante el Pleno de la Asamblea Regional para dar cuenta del nuevo modelo de transporte público que prepara el Gobierno regional.

El debate ha comenzado con la exposición de los datos extraídos del estudio del transporte en la Región de Murcia, que ha concluido que 2,5 millones de desplazamientos se realizan en el ámbito urbano; 1,12 millones dentro de la comunidad autónoma, 1,17 millones son desplazamientos a otras autonomías y 176.000 cruzan la Región. De todo lo anterior, solo el 10% se realizan en transporte público.

Para aumentar ese porcentaje, Díez de Revenga ha expuesto un plan con el objetivo de "sacar coches de las carreteras, disminuir las emisiones, mejorar la calidad del aire y reducir el tiempo en los desplazamientos".

La actuación incluye la creación de un "nuevo mapa de la movilidad cotidiana" que concrete las líneas de autobús de toda la Región, disminuyendo las concesiones de 27 a 10 y realizando un sistema "no tan radial".

Se pretende la creación de una "red de intercambiadores de transporte público" que fomente la intermodalidad en los viajes, una red de estaciones comarcales de autobús que dé servicio al 91% de la población, crear servicios de transporte urbano en las zonas turísticas que en verano multiplican su población e instar a los municipios de más de 25.000 habitantes a crear un servicio municipal de autobús.

Además, pretenden instaurar un "bono único que sirva para todos los medios de transporte urbanos e interurbanos" y unifique las tarifas y crear un "consorcio regional de transportes" con representación regional y municipal para la gestión del transporte.

Desde la oposición, el diputado del PSOE Pedro López ha afirmado que la "gestión del transporte público en la Región ha sido desastrosa" y ha puesto en duda que el plan presentado por el consejero se vaya a desarrollar "en un tiempo razonable". Ha demandado "frecuencias adecuadas" y precios asequibles para que los ciudadanos hagan más uso del transporte público.

El diputado de Podemos Rafael Esteban ha demandado la creación de una entidad pública que "asuma las competencias de las líneas deficitarias y las combine con las rentables" y la implantación de microbuses "para el tejido de pequeñas poblaciones y conectarlas, fijando la población al territorio" porque "la rentabilidad social debe estar por encima de la económica". A este planteamiento ha contestado Díez de Revenga que no se puede llevar "transportes públicos masivos a cada pueblo" de la Región porque son contaminantes y cuestan dinero.

De forma irónica, la diputada de Ciudadanos Ana Martínez Vidal ha felicitado al consejero y al PP porque hayan realizado "un plan de transportes después de 26 años en el gobierno": "A ese ritmo no me quiero imaginar el tiempo que tendrá que pasar para que ejecuten ese plan en su totalidad y no quede en un mero anuncio", ha expresado.

Por parte de los grupos que sostienen al Gobierno regional, el portavoz de los expulsados de Vox, Juan José Liarte, ha señalado que en la Región no existen "grandes concentraciones de poblaciones, como en ciudades como en Barcelona, donde hacer una red de transporte público con muchas frecuencias es más sencillo" y ha considerado que el "plan que quiera sostenerse en el tiempo es necesariamente ferroviario".

El portavoz de los expulsados de Cs, Francisco Álvarez, ha llamado a "apostar por la movilidad multimodal, buscar línea de consenso entre la administración local y regional" y mejorar el transporte en las "pedanías dentro del municipio de Murcia para no crear clases de murcianos según donde vivan".

Por último, el diputado del PP Juan Antonio Mata ha centrado su intervención en la crítica al cierre de los cercanías que ha dejado "a 1,2 millones de viajeros al año sin trenes", perjudicando a miles de trabajadores y estudiantes, y ha acabado criticando la ausencia de partidas en los Presupuestos Generales del Estado para el Mar Menor.