Su conferencia se titula ‘Arte y Ciencia, dos aspectos de una misma necesidad’. ¿Cuál sería esa necesidad?

La necesidad surge de nuestra evolución biológica. Nuestra supervivencia como especie se ha basado en la capacidad de nuestro cerebro de detectar regularidades en un mundo aparentemente caótico para anticipar los problemas y evitarlos. Saber cuándo sembrar, cuándo lloverá, cuándo migrarán las manadas de rumiantes, cómo se comporta un depredador... Ahora, muchas de esas cosas han perdido sentido adaptativo, pero nuestro cerebro sigue sintiendo la necesidad de detectar e interpretar patrones. La ciencia lo hace para comprender el mundo, el arte los genera para que nuestro cerebro quede ‘enganchado’ en ellos.

Comprendiendo esta relación entre arte y ciencia, podría desarrollarse una ciencia del arte, sin que eso suponga limitar la necesaria creatividad y espontaneidad de los artistas.

¿Qué peso tienen el Arte y la Ciencia en la Región de Murcia?

Murcia ha dado grandes artistas y grandes científicos; valgan Ramón Gaya, Isaac Peral, Juan de la Cierva como ejemplos, de apenas un par de disciplinas, de a dónde llega nuestra creatividad. El denominador común es, sin embargo, la precariedad de medios con los que trabajaron y las resistencias internas y externas que tuvieron que superar. En ese sentido nada ha cambiado. El peso real lo termina determinando la historia y su obra ahí queda.

Usted es ecólogo. Un buen uso de la Ciencia es clave para un desarrollo sostenible, pero, ¿cómo puede ayudar el Arte?

El arte es un lenguaje que transmite mensajes que, a diferencia de la ciencia, utiliza el sentimiento en lugar de la razón. Con frecuencia, los razonamientos se manipulan o nos bloqueamos ante ellos. Por eso, los científicos tenemos dificultades para transmitir la verdad y sufrimos la maldición de Casandra. El arte puede romper esas barreras y transmitir la verdad por una vía para la que solo los que van de sabios tienen resistencias insalvables.

La conferencia la hará con alumnos de Secundaria. ¿Cómo valora el interés de los jóvenes por la Ciencia y el Arte?

La experiencia previa en otras organizadas por la FEM fue muy positiva. En esas edades no se han construido las barreras y prejuicios que impiden ser permeables a la verdad y tanto el arte como los razonamientos científicos son perfectamente asimilados e integrados en su forma de ver el mundo. Es el mejor momento para hablar de estas cosas y ellos son capaces de disfrutarlas.