Un total de ocho movimientos sísmicos desde el pasado 12 de octubre han propiciado que, esta mañana, se convocara en Fortuna una reunión técnica para valorar los hechos y decidir las actuaciones a seguir. El consejero de Transparencia, Participación y Administración Pública, Antonio Sánchez Lorente, junto a la alcaldesa de Fortuna, Catalina Herrero, el director general de Seguridad Ciudadana y Emergencias, Antonio Luis Mula, y el director general de Vivienda, José Francisco Lajara, han participado en este comité técnico al que también han asistido miembros de la Corporación municipal, técnicos de la Consejería de Transparencia, y representantes de la Policía Local y de Protección Civil.

El presidente autonómico ha querido trasladar un mensaje de tranquilidad y prudencia. “Es difícil predecir qué va a pasar en las próximas horas, pero el Gobierno regional tiene preparados todos los recursos humanos y materiales”. En este sentido, Miras informó que el Plan Especial de Protección Civil ante el Riego Sísmico en la Región de Murcia (Sismimur), está activado, pero insistió en que lo importante ahora es mantener la calma. “Los terremotos que se ha producido no han generado grandes daños, aunque es verdad que se ha visto afectada una vivienda, pero sin daños estructurales, y una carretera, que ya está abierta al tráfico”, señaló López Miras.

Cati Herrero, alcaldesa de Fortuna, con López Miras y Antonio Sánchez Lorente L.O.

Además, se ha convocado otra reunión para el próximo lunes con los directores de los colegios del municipio para que estén preparados. La Dirección General de Seguridad Ciudadana y Emergencias también colaborará para dar consejos a los escolares de cómo actuar en caso necesario.

Protección Civil, Policía Local y los técnicos del Ayuntamiento de Fortuna van a realizar un trabajo de campo para evaluar posibles riesgos y detectar zonas sensibles. Por su parte, la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Emergencias ha aconsejado activar el Plan de Emergencias Municipal de Fortuna (PEMU) en nivel de pre-emergencia.

El consejero de Transparencia, Antonio Sánchez afirmó que “hoy día no existe forma de predecir estos fenómenos sísmicos, por eso vamos a informar y dar recomendaciones de qué hacer antes, durante y después de un terremoto”. También destacó que “los técnicos y expertos del municipio van a realizar un trabajo de campo para detectar las zonas más sensibles y los posibles riesgos, y estamos ya preparados para actuar de forma inmediata”.

De los ocho terremotos que han sucedido en los últimos días en Fortuna, el más grave fue de 3,6 mbLg y una profundidad de tres kilómetros, ocurrió ayer, día 15, a las 19:41 horas y fue sentido por la población con una intensidad de entre 3 y 4. El 1-1-2 recibió ocho llamadas, siendo el total durante todos estos días de 21.

Por su parte, la alcaldesa de Fortuna, Catalina Pérez, admitió estar preocupada. “Cada vez son más cortas las distancias en las que se producen esos movimientos sísmicos y es normal la inquietud de los vecinos”. La alcaldesa informó que el terremoto de ayer a las 19.30 horas provocó desprendimientos en la carretera que da acceso a las pedanías altas de la sierra, en el Cortado de las Peñas, “pero gracias a la colaboración del Gobierno regional, y de algunas vecinos, se solventó esta situación”, indicó.  

Consejos de la Comunidad ante un seísmo:

Antes de un terremoto, algunas cosas a tener en cuenta son: preparar un botiquín, linternas, agua embotellada y comida no perecedera, tener a mano un silbato, radio con pilas y un extintor. Hay que identificar las zonas seguras y las salidas de emergencia. Saber cómo cerrar las llaves de agua, gas y luz, revisar los enchufes y por último conocer los teléfonos de emergencias.

Durante el terremoto, lo primero es mantenerse tranquilo. Si se está en interior, alejarse de muebles, ventanas y lámparas, no salir a la calle y cubrirse, y si se está en exterior alejarse de edificios, muros y postes eléctricos. Si se está conduciendo, parar en un lugar seguro y permanecer con las luces de emergencia encendidas.

Después del terremoto hay que cerrar llaves de agua, luz y gas, utilizar las escaleras, nunca el ascensor, apagar todo tipo de fuego y no entrar en edificios dañados. Solo usar el teléfono en caso necesario y hacer caso solo de información de organismos, autoridades y fuentes oficiales.