Las madres lactantes de Portmán que participaron en 2014 en el estudio de un grupo de investigadores de la Universidad de Murcia (UMU) denuncian ahora, al conocer la publicación de los resultados, que se sienten «utilizadas, engañadas y manipuladas, ya que la información que nos dieron sobre lo que se iba a estudiar con nuestras muestras no se corresponde con lo que finalmente se ha analizado».

Así lo afirma María Rendo, presidenta de la Asociación Lactancia Madre a Madre, quien tras publicarse que los lactantes de Portmán tienen una exposición a sustancias tóxicas mayor a la recomendada por la OMS (Organización Mundial de la Salud) y tras alertar los investigadores de los riesgos de emplear leche materna como alimento exclusivo para el bebé en zonas con alta contaminación minera, critica duramente que en estos siete años no se les haya avisado a las cerca de 70 mujeres que participaron en el estudio de esto ni que se haya contactado con ellas para someter a los niños a alguna valoración.

Las madres no ponen en duda los resultados sino que critican que no se les haya informado de ellos y del objetivo final del proyecto.

Según las participantes en el estudio, a ellas se les dijo que el objetivo era analizar los beneficios de la leche materna a distintas edades y su relación con el estilo de vida de las madres, «en qué tipo de vivienda residíamos, alimentación, si éramos vegetarianas, etc, pero nunca que se iban a analizar contaminantes», apunta Rendo.

Miguel Motas defiende la investigación y dice contar con todos los consentimientos y permisos

La Asociación Lactancia Madre a Madre organizó este pasado fin de semana un encuentro en el Llano del Beal con motivo de los resultados de la investigación de la UMU publicados en prensa, reunión en la que se dieron cita varios colectivos de la Sierra Minera y el doctor Juan Antonio Ortega, coordinador del Comité de Salud Medioambiental Pediátrica de la Asociación Española de Pediatría y responsable de la Unidad de Salud Medioambiental Pediátrica de la Arrixaca.

Tras este encuentro las madres han pedido la retirada de sus muestras del estudio y que las eliminen del apartado de ‘agradecimientos’, ya que «nos sentimos engañadas».

El doctor Ortega considera un verdadero disparate que se anime a las madres a sustituir la lactancia materna por fórmulas artificiales y explica a LAOPINIÓN que «la leche materna tiene elementos y propiedades que contrabalancean y hace que tengan un mejor desarrollo neurológico que los alimentados con fórmulas artificiales», a lo que añade que «las leches en polvo en Europa alcanzan niveles más elevados de plomo que las maternas».

"La leche materna tiene elementos y propiedades que contrabalancean los tóxicos"

Juan Antonio Ortega - Coordinador de Salud Medioambiental Pediátrica de la Asociación Española de Pediatría

En este caso, insiste que «al igual que los ecosistemas están contaminados, como lo está el Mar Menor, también lo está la lactancia materna», pero considera que pese a ello «debemos recomendar la lactancia materna a todas las mujeres de las zonas de la Sierra Minera, ya que sus hijos tendrán una mejor calidad de vida» por sus beneficios.

El investigador y toxicólogo de la UMU Miguel Motas, autor del estudio junto a otros compañeros, defiende el trabajo que ha sido publicado en la revista International Journal of Environmental Research and Public Health y sostiene que cuentan con el consentimiento informado de todas las participantes y con los permisos del Comité de Ética, «ha pasado por varias revisiones internacionales y todo está en orden».

Motas aclara que «nosotros no estamos en contra de la lactancia materna, somos unos defensores de ésta», pero recuerda que «vivimos en la zona europea más contaminada por metales pesados, como reconoce la OMS y la Agencia Europea del Medio Ambiente».

"No atacamos ni estamos en contra de la lactancia materna, pero no en Chernóbil y no en Portmán"

Miguel Motas - Investigador y toxicólogo de la UMU y participante en el proyecto

El investigador lamenta esta situación y considera «muy grave que se recomiende lactancia materna exclusiva a estas mujeres». «No atacamos la lactancia materna, pero no en Chernóbil y no en Portmán», afirma.

Desde la Asociación Lactancia Madre a Madre han solicitado también una reunión a la vicerrectora de Investigación de la UMU, quien ya cuenta con toda la documentación sobre el proyecto. Desde la institución afirman que la vicerrectora está abierta a recibir a las participantes para aclarar lo sucedido.

La contaminación en la bahía persiste 25 años después

Las aguas del Mediterráneo continúan recibiendo metales disueltos del depósito de residuos mineros de la bahía de Portmán 25 años después del cese de la actividad minera, según un estudio del Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales de la Universidad Autónoma de Barcelona. El trabajo evidencia que la acumulación de residuos todavía suelta al mar aguas subterráneas que contienen metales pesados, como hierro, cadmio, níquel, zinc y plomo. La bahía de Portmán es un caso paradigmático de impacto por actividades mineras en el Mediterráneo porque la actividad minera en la zona se remonta a la época de los romanos, aunque fue entre los años 1957 y 1990 cuando se hizo una gran explotación a cielo abierto que vertió 57 millones de toneladas de residuos en la bahía.

Piden que la Unidad Medioambiental de la Arrixaca valore a los niños

El doctor Juan Antonio Ortega, responsable de la Unidad de Salud Medioambiental Pediátrica de la Arrixaca, explicó en la reunión celebrada con asociaciones el fin de semana en el Llano del Beal que las comunidades que viven sobre suelos contaminados con altos niveles de plomo y otros tóxicos, generados por los vertederos preexistentes de la minería y de sus fundiciones, están expuestas a través del aire, del suelo y de los alimentos cercanos.

Pese a esta exposición, Ortega sostiene que la AEP no recomienda medir el plomo en la leche materna para tomar decisiones clínicas porque «carecemos de niveles de referencia límite para tomar decisiones» y afirma que «en mis 21 años de experiencia profesional nunca he tenido que retirar ninguna lactancia por contaminantes de ningún tipo».

El especialista es partidario de estimular el inicio de la lactancia en la Sierra Minera y «monitorizar a los recién nacidos de madres de esta zona con niveles de 3,5 y en casos de madres con niveles de 40 en sangre aconsejamos desechar la leche hasta que bajen los niveles, pero estos casos son extremos».

Además, las participantes en el estudio reclaman que los niños sean vistos en la Unidad de Salud Medioambiental Pediátrica de la Arrixaca para hacerles un seguimiento, algo a lo que también anima el propio doctor Juan Antonio Ortega.