La Croem aspira a conseguir que las herencias tengan en la Región un trato fiscal mejor que en comunidades vecinas, como Andalucía. El presidente de la patronal, José María Albarracín, que ayer se reunió con el consejero de Economía, Hacienda y Administración Digital, Luis Alberto Marín, para plantearle las reivindicaciones de los empresarios de cara a los Presupuestos de la Comunidad para 2022, quiere que la rebaja del Impuesto de Sucesiones y Donaciones que Murcia aplica a los hijos y a los cónyuges se amplíe a los hermanos y a los sobrinos que heredan los bienes de los parientes fallecidos. La confederación empresarial también pretende conseguir la eliminación total de Patrimonio.

La iniciativa de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, abrió la caja de Pandora el pasado mes de septiembre, al anunciar la eliminación de todos los tributos autonómicos en una región en la que tampoco se pagan el Impuesto de Sucesiones ni el de Patrimonio. A la carrera de las rebajas fiscales abierta por Madrid se sumó hace unos días el presidente de la Junta de Andalucía, José Manuel Moreno, quien anunció nuevas rebajas en Sucesiones para los hermanos, tíos y sobrinos de los fallecidos sin hijos, que pagarán un máximo del 45% a partir del próximo año por el patrimonio heredado.

Los empresarios también reclaman al Ejecutivo mejoras fiscales en el IRPF para el próximo año

José María Albarracín considera que también en Murcia ha llegado el momento de ampliar las bonificaciones en este tributo y defiende que «hay empresarios sin hijos que tienen que dejar su negocio a los hermanos o a los sobrinos», pero no pueden acogerse a las bonificaciones establecidas por el Ejecutivo regional para los hijos y los cónyuges a la hora de transmitir las empresas.

El presidente del Gobierno regional, Fernando López Miras, presumía en la apertura del Foro ‘Avanza’ de Amefmur celebrado a finales de septiembre de que la Comunidad ha ahorrado 1.000 millones de euros a los contribuyentes de la Región que han heredado desde que Murcia eliminó el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. La rebaja ha hecho que muchas familias se hayan adelantado y estén donando en vida sus bienes en previsión de que la armonización fiscal anunciada por el Gobierno central ponga fin a las ventajas fiscales vigentes en la Región desde 2018.

También la Croem quiere adelantarse a una eventual reforma y por eso planteó al consejero de Hacienda la ampliación de las bonificaciones a familiares de segundo y tercer grado, tal y como ha hecho la Junta de Andalucía.

José María Albarracín también quiere que los empresarios murcianos se liberen del Impuesto de Patrimonio, que deben pagar los contribuyentes con unos bienes superiores a los 700.000 euros. En la Región hay algo más de 4.000 ricos obligados a declarar este tributo, que genera unos 20 millones de ingresos a la Comunidad.

El jefe del Ejecutivo regional recordó a los empresarios presentes en el congreso de Amefmur que va a introducir bonificaciones en el Impuesto de Patrimonio, tal y como había anunciado en la Asamblea Regional, de las que podrán beneficiarse los contribuyentes que realicen inversiones en proyectos de interés regional, pero la patronal quiere que desaparezca por completo.

También quiere que los Presupuestos para el próximo año incluyan rebajas en el IRPF. Fuentes de Hacienda indicaron que en las cuentas de 2022 habrá algunas mejoras en este impuesto.

Entre las reivindicaciones que Albarracín planteó ayer al consejero de Hacienda figuran igualmente algunas obras, como las carreteras de El Carche (Jumilla) y de Alguazas.