Ciudadanos ha recuperado la voz en la Asamblea regional después de seis meses. La diputada naranja, Ana Martínez Vidal, ha sido la encargada de intervenir este miércoles en el pleno para hablar sobre turismo y ha lamentado que la Región se encuentre en el decimosegundo puesto como destino turístico del país.

“Después de vivir en nuestra particular prisión durante más de seis meses, en los que no se nos ha permitido intervenir de modo alguno en esta Asamblea, vulnerando así nuestros derechos como diputados y el de los casi 80.000 murcianos que nos otorgaron su voto, hoy por fin les devolvemos su voz con un tema que nos preocupa enormemente y que el Partido Popular, es evidente, no ha sabido gestionar durante los últimos 26 años”, ha explicado.

Martínez Vidal ha señalado que el Gobierno regional ha sido el que ha impuesto más restricciones al sector de la hostelería de todo el país, siendo una de las tres Comunidades Autónomas más restrictivas junto con Cantabria y Aragón y los únicos que aún mantienen límites de horarios y aforo, estando las barras y las pistas de baile aún cerradas.

“Desde Ciudadanos lo venimos reiterando desde el inicio de esta pandemia, lo hicimos en Gobierno y lo haremos también desde la oposición: no hay mejor plan de rescate que permitir a nuestras empresas y autónomos trabajar en condiciones de igualdad y con todas las garantías sanitarias”, ha recalcado la diputada naranja.

Como consecuencia de esas “decisiones arbitrarias y a golpe de titular”, en las que durante meses no siguieron ningún criterio técnico o científico, “han desaparecido 150 empresas y unas 800 personas se han quedado sin empleo”, ha recalcado, según informó el propio Presidente de la Patronal de la Hostelería.

Respecto a los viajeros que recibió la Región de Murcia en el segundo trimestre del año, según los datos de la última encuesta de Turismo de Residentes del Instituto Nacional de Estadística, ha indicado que “ostentamos el decimosegundo puesto como destino turístico del país. No creo que sea una situación como para sacar pecho ni hacer alarde de nada. Estamos, como siempre, a la cola en cuanto a destino turístico nacional. ¿Cómo es posible que una Región con tantos atractivos se mantenga a la cola del país a lo largo de casi tres décadas?”, se ha preguntado. “Es obvio que algo no se está haciendo bien. Pero no ahora, sino desde hace 26 años. Algo no funciona, pero ustedes siguen empeñados en hacerlo igual, igual de mal”. La formación considera que su salida del gobierno ha repercutido negativamente en la promoción turística y recuerda el gran trabajo que hizo su ex directora general de Calidad Turística, Ester Tenza, que elevó los destinos adheridos a SICTED en al Región de 7 a 23, recibiendo reconocimientos nacionales por este trabajo.

Además, ha subrayado que el principal fracaso de la gestión del Gobierno regional en el ámbito turístico, y que resulta especialmente doloroso para los ciudadanos de esta región, es el Mar Menor. “Ustedes, con su política de inacción y dejadez, han permitido la destrucción del Mar Menor y, de paso, lo han aniquilado como destino turístico único. Lo que debería ser nuestro principal atractivo se ha convertido en una zona de la que la gente huye. Era algo difícil, muy complicado de conseguir, pero ustedes lo han logrado”, ha lamentado.

Asimismo, ha criticado la actitud de dejadez del Gobierno regional en la laguna salada. “¿Qué han hecho para salvar al Mar Menor, para ayudar a su recuperación desde que se produjera la sopa verde en el año 2016? No han hecho nada para salvar el Mar Menor”, ha señalado. “Y lo sabe todo el mundo. Lo saben los empresarios, la patronal, los trabajadores del sector, los residentes de la zona y los turistas que nos deben elegir para pasar sus vacaciones. El Gobierno regional y su presidente, López Miras, no ha hecho nada por el Mar Menor. Esa es la triste realidad”. Por todo ello, la formación liberal, encabezada por su Coordinadora Autonómica, María José Ros, va a asistir a la manifestación a favor de la ILP del Mar Menor del próximo 7 de octubre, aunque lo harán, eso sí, sin logos ni símbolos políticos, sino como cualquier otro ciudadano.