El presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, impulsará el denominado Pacto por las Infraestructuras de la Región de Murcia, con el fin de "aunar todas las voces, organismos y entidades posibles para cambiar los planes del Gobierno central de cerrar las vías de tren durante casi tres años y medio".

"Existen otras soluciones técnicas perfectamente viables, y por eso queremos evitar el maltrato a la Región y su aislamiento ferroviario a causa de decisiones injustas y arbitrarias que se toman a cientos de kilómetros", según ha explicado el consejero de Fomento e Infraestructuras, José Ramón Díez de Revenga.

López Miras se ha reunido este viernes con el portavoz de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril de la Región de Murcia, Antonio del Campo, donde abordaron "con preocupación" los planes del Ministerio de Transportes de suspender desde octubre la línea de cercanías entre Murcia, Lorca y Águilas. Asimismo, coincidieron en que es compatible la modernización del ferrocarril con el mantenimiento de la línea de cercanías.

Igualmente, el titular de Fomento ha anunciado que "el presidente López Miras pedirá en las próximas horas una reunión urgente con la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, para, de la mano de la Plataforma, solicitarle que recapacite y retire esta medida tan perjudicial para la Región de Murcia".

"Hay que recordar que el cambio de planes del Gobierno central se ha producido ahora y de forma drástica, ya que antes estaba previsto que las obras se realizaran tal y como reivindicamos: manteniendo los servicios", subrayó el consejero, quien afirmó que el Pacto propuesto por la Comunidad "busca recoger el clamor popular y el rechazo social a que se interrumpan los servicios de tren y nos convirtamos en una isla ferroviaria".

Efectos de los cambios de movilidad

"Esto no debería ser una confrontación política", ha afirmado el consejero, "sino que estamos hablando de servicios públicos que, de ser suspendidos, cambiarían drásticamente los hábitos de la movilidad de los ciudadanos". Así, "los ciudadanos tendrían que optar por el vehículo privado, lo que colapsaría aún más la A-7 y traería más atascos, más accidentes y más emisiones contaminantes".

Esta tendencia, señaló Díez de Revenga, "va exactamente en la dirección contraria de las políticas de transición ecológica y movilidad sostenible de la Unión Europea". Asimismo, ha añadido que "el Gobierno regional no puede pasar por alto que se cambien los planes de obras previstos hace años sin el más mínimo diálogo. No vamos a mirar hacia otro lado ante esta interrupción en la línea de ferrocarril, cuando en otras comunidades se han realizado obras de similares características sin impedir el tráfico ferroviario".

"Tampoco podemos tolerar que el Ministerio ponga como excusa para esta suspensión la justificación de los fondos europeos Next Generation, cuando estas infraestructuras están financiadas mayoritariamente con fondos Feder", ha afirmado Diez de Revenga, quien confirmó que el Ejecutivo autonómico ya ha pedido amparo a la Comisión Europea ante esta situación.

Movilizaciones anunciadas

Por su parte, Del Campo ha explicado que su intención con la reunión era que el Gobierno de la Región de Murcia se posicionara "claramente" en contra de la decisión de Adif y del Ministerio de Transportes de cerrar el 1 de octubre los servicios de cercanías con Lorca y Águilas.

Se trata, añade, de una decisión que "viene a adelantar, incluso, la propia licitación de contratos de servicios alternativos de autobuses que estaban previstos para el 20 de noviembre".

Este jueves, la Plataforma tuvo una reunión "importante" con todos los grupos parlamentarios en la Asamblea Regional y con el presidente del parlamento autonómico, Alberto Castillo, para intentar que también la cámara se posicionara en contra de esta decisión "como órgano de representación de todos los ciudadanos de la Región".

De la misma forma, su intención es plantear alternativas viables para mantener el servicio de cercanías con Lorca y Águilas, al mismo tiempo que se van ejecutando las obras del Corredor Mediterráneo y, en concreto, de la conexión entre Murcia y Almería.

Ha lamentado que la decisión de cerrar las cercanías el 1 de octubre es "totalmente injustificable" porque, tal y como ya han recogido los medios de comunicación, se pretende "suprimir el servicio pero mantener la línea abierta hasta Alcantarilla para que los trenes que circulan en la Región se puedan mantener en el único taller de mantenimiento que existe, en la estación de mercancías de Nonduermas".

"Por lo tanto, hasta febrero, fecha en la que hipotéticamente sitúan la construcción de unas nuevas instalaciones de mantenimiento en la estación de Cartagena, van a mantener el servicio abierto hasta Alcantarilla para que puedan entrar los trenes a este taller y para que puedan circular todos los trenes, tanto de viajeros como de mercancías que vengan desde Cartagena", ha señalado.

De esta forma, Del Campo entiende que la decisión de cerrar el 1 de octubre "no tiene justificación alguna", y cree que "hay tiempo suficiente para sentarnos y valorar las distintas posibilidades que hagan compatible mantener el servicio y ejecutar las obras, como planteaban los proyectos que se adjudicaron en 2019".

En este sentido, lamenta que "quedan muy pocas posibilidades". Tras el pronunciamiento de la Asamblea Regional, las gestiones del Consejo de Gobierno y una gran movilización que la Plataforma está organizando para el día 25 de septiembre en la ciudad de Murcia, además de otra que habrá el jueves 16 de septiembre en Alcantarilla.

Del Campo señala que, hasta ahora, solo les han planteado una justificación que solo se pueden acoger a los Fondos de Reconstrucción y Resiliencia aquellos proyectos que se hayan adjudicado después de febrero de 2020. "Esto no quiere decir que no nos podamos acoger a estos fondos, porque todavía faltan por licitar y adjudicar la variante de Totana, el soterramiento de Lorca, el tramo Pulpí-Águilas y el tramo entre Lorca y Pulpí".

Con estos cuatro tramos, Del Campo estima que puede haber una inversión de entre 500 y 600 millones para acogerse a esos fondos europeos de Resiliencia.

Otro de los argumentos que se esgrimen para justificar el corte, según Del Campo, es que "se van a generar molestias a los vecinos" si no se corta el servicio. A este respecto, ha reconocido que "cualquier obra genera molestias al entorno", pero explica que, en el tramo entre Murcia y Nonduermas afecta a 104 propiedades con las que ya ha sido acordada su ocupación temporal.

Además, en Alcantarilla puede afectar a unas 20 plazas de garaje que no podrían ser usadas, pero advierte que "esto no se contrapone con las molestias que originan a 1,2 millones de viajeros que usan el tren en el servicio de cercanías de Lorca-Águilas".

Alternativas

Del Campo pide que, en los seis meses que quedan hasta la construcción del nuevo taller en Cartagena, se paralice la decisión tomada por Adif, se comprometa a plantear una alternativa que compatibilice el mantenimiento de los servicios de Cercanías y las obras, estableciendo un eje troncal que siempre estaría funcionando entre Murcia y Lorca.

Además, propone "valorar, en función de la ejecución de las obras, la conexión con Águilas y las estaciones que hay en Murcia y en Lorca para mantener el servicio".