Los hoteles de cuatro estrellas más emblemáticos de la costa han cambiado de marca en los últimos años con la llegada de nuevas cadenas y de grupos inversores que han apostado por implantarse en la Región. El caso más representativo es el del Doblemar de La Manga, uno de los establecimientos más grandes, que fue adquirido en 2016 por la cadena mallorquina Roc y que tras la pandemia ha reabierto sus puertas con la enseña de AluaSun, a la que los propietarios han encargado la gestión. También han cambiado de marca los hoteles de La Manga Club y Hacienda del Álamo.

La irrupción de los grupos inversores en el negocio turístico de la Región ha ido acompañada también de nuevas compañías dedicadas a la gestión hotelera, como la estadounidense AMResorts, la gestora de marcas hoteleras de Apple Leisure, que ha asumido 16 hoteles del grupo balear Roc, entre ellos el Doblemar.

El hotel Príncipe Felipe de La Manga Club, de cinco estrellas, que durante mucho tiempo lució la enseña de lujo de la cadena Hyatt, cambió de dueño en 2019 con la entrada de Hesperia en el accionariado de la anterior propietaria del complejo turístico y deportivo, Arum Group. Tras la compra de una participación mayoritaria que le permitió tomar el control, ha puesto su marca al hotel.

Otro hotel de La Manga, el Mangalán, que fue adquirido hace varios años por la cadena Poseidon, ha reabierto este año sus puertas después del paréntesis de la pandemia luciendo la nueva enseña.

Entre los hoteles de la costa murciana que han cambiado de dueño figura también el establecimiento de Los Alcázares construido por el cartagenero Juan Antonio Roca, cabecilla de la operación Malaya, que fue adquirido en enero por un grupo inversor húngaro. Por otra parte, el hotel Hacienda del Álamo, propiedad de la Sareb, sigue perteneciendo al ‘banco malo’, que lo terminó en 2018 para alquilarlo, después de que pasara una década cerrado sin estrenarse. Hace un año cambió la marca Sheraton por la de TDI Advisors, que gestiona otros hoteles de lujo en Málaga, Marbella y Mallorca.

Fuentes de la Consejería de Turismo han informado de que también otros establecimientos pequeños, como La Galerica, de Mazarrón, o el Hotel del Sol, de Puerto Lumbreras, han cambiado de dueño en los dos últimos años.