Echar la vista al tiempo del mes pasado obliga a poner el foco en la asfixiante ola de calor que se vivió del 12 al 15 de agosto. Ese último día, además, Murcia alcanzó su récord histórico al llegar a los 46,1 grados de temperatura y Alcantarilla hizo lo propio al registrar 47 grados. Desde 1994 no se superaban los 45,7 grados en la capital del Segura y los 46,1 en Alcantarilla.

Para el meteorólogo de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la Región de Murcia Luis Bañón está clara la «tendencia alcista» en las temperaturas en el Levante, «en la línea» con las premisas del cambio climático, aunque reconoce que es difícil establecer una atribución directa. No obstante, asegura que en un entorno cálido como el de la Región, «cada vez va a ser más fácil superar esas efemérides».

La temperatura media mensual de agosto en la Región fue de 26,8 grados centígrados, con una anomalía de 1,5 grados por encima de la temperatura media del periodo, y un carácter termométrico muy cálido. Este agosto ha sido el cuarto más cálido desde 1961, y el segundo más cálido del siglo XXI tras el de 2012. La media de las máximas, 33,6 grados, tuvo una anomalía de 1,4 grados positivos, y la media de las mínimas, 20,1, tuvo una anomalía de 1,7 grados por encima de la media.

En cuanto a las precipitaciones, la incertidumbre siempre es elevada en el Mediterráneo y los fenómenos «van a ser cada vez más severos» en la Región, opina Bañón. «Largos períodos sin llover y, de repente, una fuerte cantidad de agua», señala. Estos fenómenos también van en la línea del cambio climático.

No obstante, durante el mes pasado, la precipitación media en la Región fue de 2,3 litros por metro cuadrado, tan solo el 21% del valor de la mediana, con lo que el carácter pluviométrico fue muy seco. Este mes ha sido el décimo agosto más seco desde 1961, y el tercero más seco del siglo XXI, detrás del de los años 2008 y 2014.

Las acumulaciones más importantes se registraron en la comarca del Noroeste con precipitaciones superiores a 10 litros por metro cuadrado, llegando a registrarse más de 30 litros en algunas zonas. También es destacable que en el observatorio de Murcia se han observado tres días con lluvia de barro, el 10, 11 y 16 de agosto.

El escenario hacia el que vamos no es muy optimista. Juan Andrés García Valero, portavoz adjunto de la Aemet en Murcia, ya adelantó a LA OPINIÓN que «lo vemos en los récords a escala global», advirtiendo que si no se toman medidas pronto, para 2050 la temperatura media de la Región habrá subido entre 2 y 4 grados.

Más desastres en el mundo

Si la situación climática se desestabiliza en la vertiente mediterránea, los desastres se multiplicaron por cinco en el último medio siglo en todo el mundo impulsados por los fenómenos meteorológicos extremos que propicia el calentamiento global, que causaron una media de 115 muertes y 169,1 millones de euros perdidos al día, según el informe más exhaustivo sobre esta cuestión que se ha elaborado hasta la fecha, a cargo de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

Si bien esas cifras son preocupantes, lo cierto es que gracias a la tecnología que permite emitir alertas tempranas y gestionar mejor los desastres, el número de muertes es casi tres veces menos ahora con respecto a medio siglo atrás. «La cantidad de fenómenos meteorológicos, climáticos e hidrológicos extremos está aumentando, y esos episodios serán más frecuentes y graves en muchas partes del mundo como consecuencia del cambio climático», dijo el jefe de la OMM, el finlandés Petteri Taalas.

Ello significará más olas de calor, sequías e incendios forestales como los observados recientemente en Europa y Norteamérica.

Los científicos proyectan que en amplias zonas de Asia y Norteamérica las temperaturas subirán y las lluvias serán más intensas en las próximas décadas. Lo contrario ocurrirá de forma previsible en la cuenca del Mediterráneo, en el sur de África, en Australia y en determinadas áreas del continente americano, donde las sequías se acentuarán. «Esto es una mala noticia en lo que se refiere a desastres y a la productividad agrícola», señaló Taalas.

Es igualmente una mala noticia para las poblaciones que están más expuestas a las consecuencias devastadoras de estos desastres. Actualmente, las víctimas de desplazamiento forzoso a causa de desastres son más que las causadas por conflictos armados alrededor del mundo, reveló la responsable de la ONU para la reducción del riesgo de desastres, Mami Mizutori, que acompañó a Taalas en la presentación del informe.