Colectivos y sindicatos del sector educativo exigieron ayer un refuerzo de las plantillas docentes de cara al inicio del curso escolar 2020-2021, en el que, recordaron, no se contará con los 1.500 «profesores covid» contratados el curso pasado para reforzar las medidas de prevención de los contagios por coronavirus en las aulas. Coincidiendo con la rueda de prensa que la consejera de Educación y Cultura, Mabel Campuzano, ofreció en el IES José Planes para dar detalles del inicio del curso, el secretario general de la Federación de Enseñanza de CC.OO., Ignacio Tornel, lamentó que habrá 493 docente menos en la plantilla ordinaria de la Comunidad. «Esa carencia se suma a la no renovación de los contratos de los 1.500 maestros y profesores contratados con fondos covid para hacer frente a la gestión de la pandemia», señaló Tornel, que exigió una reunión con la consejera para poner encima de la mesa esta problemática, «pero no nos quiere recibir».

Por su parte, el responsable de Educación de UGT, Ernesto de la Cruz, mostró su preocupación por que puedan repetirse «los problemas de conciliación» que sufrieron las familias el pasado curso y también reclamó que se refuercen las contrataciones.

Con los representantes sindicales se reunió ayer la portavoz regional de Podemos, María Marín, que además de compartir sus principales demandas, consideró como una «purga» la no renovación de los docentes de refuerzo, «que eran ya de por sí insuficientes para paliar las necesidades del sistema», aseguró. En su opinión, el curso va a arrancar «sin la preparación mínima exigida» en una pandemia como la actual. Marín apuesta por «otro modelo de educación pública» que cuente con «los recursos necesarios, el personal adecuado y los espacios suficientes».

Por su parte, el sindicato Anpe destacó que la Consejería ha planteado un calendario de adjudicación de docentes «que promete generar problemas importantes en el inicio del curso». «Prácticamente todos los municipios, comienzan las clases antes de que se adjudiquen todas las vacantes y sustituciones docentes, lo que conlleva que el alumnado no pueda ser atendido de forma óptima, perjudicando además la organización del centro», indicaron desde el sindicato.

Por otra parte, en cuanto al profesorado de refuerzo covid, recordaron que otras comunidades sí reforzarán sus plantillas.

El PSRM consideró una «desfachatez» que la Consejería deje abierta la puerta a cerrar aulas ante la bajada del número de alumnos «en lugar de aprovecharla para mejorar la pública y reducir las ratios de alumnos por clase». Para Espín, que un menor número de matriculaciones no sirva para reducir el número de alumnos por aula y potenciar programas de refuerzo educativo, es algo decepcionante.

Se podría «mejorar la atención del alumnado y reducir las elevadísimas tasas de fracaso y abandono escolar temprano», cuestiones que son de «simple voluntad política».

El diputado también se mostró muy crítico con la decisión de no volver a contratar este curso a los 1.500 «docentes covid».