La rotura de una tubería de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla que abastece de agua potable a la Academia General del Aire dejó un vertido ayer que desembocó a través de un emisario en la playa Barnuevo de la pedanía de Santiago de la Ribera en San Javier. El derrame de agua apta para consumo humano, que se mezcló con la tierra presente en las zonas terregosas de la calle Cabo Huertas, provocó una imagen que alarmó a muchos bañistas que se encontraban disfrutando de la playa. Como precaución, el Ayuntamiento de San Javier cerró dicha playa pero los análisis posteriores descartaron la presencia de contaminantes. Esta tubería gestionada por la Mancomunidad no es la primera vez que sufre una rotura debido a la antigüedad de la misma y por ello precisamente el organismo sacó a licitación en mayo la renovación de todo el ramal de conexiones que abastece de agua a la AGA por un importe superior a los 200.000 euros.

El agua potable procedente de la tubería rota fue recogida por la canalización de la pedanía hasta llegar al tanque de tormentas, que se vio superado por los aportes procedentes de esta rotura y por las lluvias de este lunes. El exceso de agua acabó en la playa de Barnuevo, con la tierra mezclada, lo que desconcertó y enfadó a muchos bañistas por los vertidos que se han producido en otras ocasiones por dicho emisario. El Ayuntamiento especificó que no ha sido un vertido "perjudicial" para el Mar Menor y que el agua solo contenía "cloro".

La Mancomunidad, tras ser alertada de la rotura, procedió a controlar la fuga de agua y reparar la tubería, tras lo cual especificó en un comunicado que no había "ningún peligro" para los bañistas, a quienes pidió perdón por las molestias causadas. El organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica concluyó el proceso de licitación de la renovación de todo el ramal de la tubería en la base aérea de San Javier el pasado 20 de julio.