Docentes Unidos indicó este sábado, en un comunicado, que «el veto parental no se ha impuesto en la Región de Murcia». «Ante la imposibilidad de aplicarlo por parte de la Consejería de Educación, ya que no tiene encaje legal, se ha planteado un artificio absurdo que no hace más que cargar a los docentes con más burocracia innecesaria, como si no tuviéramos ya bastante», destacan al respecto.

Así, concretan que «no se va a pedir permiso a las familias para realizar actividades complementarias, que es lo que exigía el veto parental, sino que se va a seguir informando a las familias, añadiendo un plus de engorro e incoherencia, con el único objetivo de avisar a aquellos padres y madres que quieren llevar a cabo un veto en la clandestinidad, sin apoyo de la administración».

A su juicio, «la Consejería de Educación de Murcia, con esta ridícula pero peligrosa medida, está incitando a las familias que apoyan el veto a no llevar a sus hijos a los centros educativos los días que haya actividades que a ellos no les gustan». 

«Con esta medida están propiciando el absentismo escolar y que esas familias nieguen el derecho a la educación de sus hijos saltándose la ley de protección de la infancia y la adolescencia».

Apostillan que «las actividades complementarias siempre se han reflejado en la Programación General Anual que se aprueba en el Consejo Escolar, donde están las familias siempre representadas. Desde ahí se le da publicidad y es un documento a disposición de la comunidad educativa».

«Por otro lado, desde siempre y obligatoriamente, los docentes están presentes en todas las actividades complementarias, ya que se realizan en horario lectivo. No se añade nada nuevo: se trata de una pose, un guiño a sus votantes», dejan claro.