El Partido Socialista de Murcia salió ayer en defensa de los planes del Ministerio esgrimiendo la bandera de haber negociado el retraso en la implantación de los 8,6 metros cúbicos por segundo en el Tajo hasta 2027. Y hasta entonces, «el PSOE va a seguir trabajando durante estos seis meses para que cada metro cúbico que se deje de recibir del trasvase Tajo-Segura, se compense con otro metro cúbico procedente de otra fuente a un precio justo», señaló ayer el diputado regional Alfonso Martínez Baños.
Insistieron en la inversión prometida del Ministerio de poner encima de la mesa 500 millones para la desalación en el Levante. Por otro lado, el secretario general del PSRM-PSOE, Diego Conesa, cogió el argumento del cambio climático y la necesidad de adaptar las cuencas hidrográficas a las consecuencias que pueda tener este fenómeno a largo plazo para justificar la decisión de Transición Ecológica. «La actitud del PP es temeraria. En lugar de mentir y utilizar a nuestra agricultura políticamente contra el Gobierno de España, debería sumar esfuerzos para encontrar soluciones y apoyar al sector. Negando la realidad del cambio climático, llevan a nuestra Región al abismo». Su compañero de partido, el presidente valenciano Ximo Puig, pronunció ayer la misma idea para hacer entender la necesidad de ese aumento en el caudal ecológico del Tajo.
«Ribera agrava el problema»
El PP pidió ayer la dimisión de la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, «por anunciar la muerte del Trasvase Tajo-Segura y sus ataques a España, al Levante y a la Región de Murcia». En palabras del diputado regional del PP, Jesús Cano, en la Comisión Especial de Agua que se celebró ayer en la Asamblea Regional: «Lejos de solucionar el problema del agua, lo que ha hecho ha sido agravarlo, por su política antitrasvasista, ideológica y partidista», señaló.
«El cierre del Trasvase Tajo-Segura supone una caída de 1.700 millones de euros en el PIB de la Región de Murcia, así como la desaparición del 59% de la agricultura regional y la eliminación de 45.000 empleos directos», ha recordado Cano, que también ha remarcado que «todas las decisiones que ha tomado la señora ministra siempre han perjudicado y castigado, a sabiendas de que así lo hacía, a la Región y al Levante de España», afirmó Cano.
Vox, por su parte, mostró ayer «todo su apoyo a los regantes en el enésimo ataque del Gobierno social-comunista a la Región de Murcia».
