Un centenar de personas se sumaron el pasado domingo a la IV Marcha por un Río Vivo en Bullas para reivindicar la defensa y preservación de este espacio acuático. En noviembre de 2019, gracias a la abundancia de lluvias y a que no se produjeron extracciones a través de pozos, el manantial volvió a brotar de forma espontánea y lo sigue haciendo hasta la fecha. Piden el mantenimiento y conservación de dicho caudal y de la biodiversidad que se ha creado en torno a este cauce de agua.