Los recortes de empleo que ha anunciado la banca en lo que va de año supondrán la eliminación de 656 puestos de trabajo, que representan más del 18% de los puestos de trabajo que las entidades financieras tienen en la Región. Esto supone la desaparición de casi uno de cada cinco empleos, que se sumarán a los despidos y bajas pactadas con más sigilo por las demás entidades, dado que el goteo es permanente desde hace más de una década. La banca tiene en este momento unos 3.600 trabajadores en la Región, cuando en 2010 daba empleo a 5.400 personas, según los datos facilitados por el secretario general de la Federación de Servicios de UGT, José Hernández Aparicio. Las entidades financieras han perdido por tanto un tercio del empleo en apenas una década.

En este periodo el número de sucursales se ha reducido a la mitad. Según un estudio publicado por el Banco de España, la Región tenía antes de la crisis de 2008 1.356 oficinas bancarias, pero con las fusiones de las cajas de ahorros y de los grandes grupos financieros se abrió un proceso de concentración, que este año tendrá consecuencias irremediables.

Apenas unas semanas después de que se materializara la fusión de Bankia y Caixabank, el banco catalán que ha heredado la red de oficinas de la antigua Cajamurcia ha anunciado un expediente de regulación de empleo que eliminará más de 8.000 puestos de trabajo en toda España, 410 de ellos en la Región.

La entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri, el último presidente que tuvo Bankia antes de la fusión, prescindirá en la Región de casi un tercio de su plantilla, cercana a los 1.340 trabajadores.

Al recorte anunciado por CaixaBank se suma al ERE del BBVA, que también quiere prescindir de 3.450 trabajadores, 49 de ellos en Murcia según la previsión inicial, con el compromiso de recolocación. Esta entidad, que en los últimos años ha venido reduciendo su presencia, se propone cerrar 530 oficinas en España.

Los ajustes de estos dos grupos financieros coinciden también con el ERE anunciado por el Banco Santander a finales del pasado año, que se irá aplicando de forma escalonada durante el primer semestre de 2021. En la Región está previsto que la entidad presidida por Ana Patricia Botín reduzca su plantilla en 108 personas y cierre 29 oficinas. Hasta el pasado mes de marzo se habían adherido voluntariamente 44 empleados y otros 49 han pasado a los servicios externos de compañía Santander Tecnología y Operaciones, lo que supone 88 bajas.

Según apuntó el secretario de la Sección Sindical de CC OO en el Santander, José Luis Romero, si a mitad de este año no se han alcanzado las cifras recogidas en el pacto con los sindicatos , que preveía la amortización de 3.572 puestos de trabajo y la reubicación de 1.500 empleados, el ERE se completará mediante despidos, en los que «no se aplicarán ya los incentivos previstos para los empleados», que según el dirigente de CC OO pueden rondar entre los 60.000 y los 80.000 euros.

Romero señaló que las bajas se van producido de forma paulatina, a medida que van desapareciendo sucursales. «Cada quince días cierra una tanda de oficinas», explicó.

En Murcia está previsto el cierre de 29 de las 70 oficinas que mantenía la entidad después de la absorción del Banco Popular, que dio ya lugar a otro ERE.

Por otra parte, el Banco Sabadell inició a finales del pasado otro recorte, que podía llegar hasta las 170 personas, pero finalmente se quedó en 89. No obstante, fuentes sindicales apuntan que el Sabadell, heredero de la antigua estructura de la CAM, prepara otro recorte para final de año.