La compra de pruebas rápidas para diagnosticar la covid-19 en farmacias y sin receta se convertirá en una realidad tras la rectificación del Ministerio de Sanidad. El departamento de Darias da marcha atrás en su decisión de no permitir la venta de test sin prescripción médica por ser una enfermedad de declaración obligatoria. Además, el decreto actual, Real Decreto 1662/2000, de 29 de septiembre, prohíbe la comercialización de pruebas de autodiagnóstico sin receta, a excepción de los test de embarazo, de fertilidad, la prueba para el virus del VIH o la de glucemia. Con estos cambios, también se incluirán entre las excepciones los test rápidos para la covid.
Con el nuevo decreto ley, cuyo borrador Sanidad ha puesto a exposición pública desde el 30 de abril al 13 de mayo, se da respuesta a una petición que el sector farmacéutico y varias comunidades autónomas, entre ellas la Región de Murcia, llevaban meses trasladando al Ministerio.
Según este documento, el uso de distintos métodos diagnósticos es una de las piezas fundamentales para la identificación rápida de los casos positivos y el control del avance de la pandemia. Es por ello que el real decreto contempla no solo la comercialización de las pruebas, sino que también da luz verde a que se puedan publicitar, hecho que hasta ahora tampoco estaba autorizado.
La disponibilidad de estos productos «permitirá a la población general la realización de las pruebas sin la intervención de un profesional sanitario, lo que reducirá en cierta medida la presión asistencial de los centros sanitarios, a la vez que permitirá la identificación rápida de sospechas de casos positivos», según refleja el propio borrador.
El Ministerio ha solicitado ya a las administraciones públicas los informes necesarios para llevar a cabo esta modificación.
Las farmacias aplauden la medida
La propuesta del nuevo decreto ley ha sido muy bien recibida entre los profesionales farmacéuticos, que reclamaban desde hace meses poder ofrecer estos test a los ciudadanos sin la necesidad de que un médico los tuviera que prescribir previamente.
La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de la Región de Murcia, Paula Payá Peñalver, reconoce que en la Región llevaban tiempo esperando esta decisión que ha valorado como «un paso muy importante en la prevención de los contagios».
Para Payá, la red de oficinas de farmacia «es un punto de referencia esencial en la lucha contra la pandemia». Además, la presidenta del Colegio considera que incluir a las farmacias en el plan de prevención y lucha contra el coronavirus «puede ser una estrategia muy efectiva».
Asimismo, se muestra convencida de que poder comercializar estas pruebas rápidas para detectar el coronavirus «ayudará a descongestionar la Atención Primaria».
No obstante, la presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de la Región de Murcia lamenta la demora con la que llega la rectificación del Ministerio de Sanidad, ya que es una decisión que «tendría que haber llegado antes». Además, hace hincapié en que las farmacias de la comunidad «fueron de las primeras de España en solicitarlo a Sanidad».
«La farmacia garantiza la trazabilidad del circuito que siguen los test, su calidad en términos de sensibilidad y precisión, y el contacto permanente con las autoridades sanitarias», destaca Payá, para quien la figura del farmacéutico «es garantía de proporcionar la información correcta a los ciudadanos sobre el uso que deben hacer de la prueba».
Del mismo modo, la presidenta de los farmacéuticos de la Región estima que convertir a las oficinas de farmacia en el punto de adquisición de estas pruebas «hace que los test sean accesibles para todos».
