Preguntado por este diario por si cree que la denominada ‘telemedicina’ ha llegado para quedarse, Jesús Abenza, médico especialista en Atención Familiar y Comunitaria y vicepresidente de la Sociedad Murciana de Medicina Familiar y Comunitaria (Smumfyc) apunta que «posiblemente», puesto que «para la gente joven, es la vía preferente para contactar con su médico». 

Acerca de los motivos, el doctor estima que lo hacen «primero, por comodidad, y luego porque les permite resolver motivos de consultas que no implican una presencia física». 

Para, por ejemplo, pedir que se incluya un medicamento en la receta, e ir a recogerlo luego en la farmacia, la ‘telemedicina’ supone una ventaja. Sin embargo, estos avances tan del gusto de los jóvenes «han creado una barrera importante en personas como nuestros mayores, que no tienen acceso a los medios digitales» y se ven abocados a llamar por teléfono. En este sentido, Abenza lamenta que «no se ha incrementado ni el personal que responde a los teléfonos ni los teléfonos en sí».