El Partido Popular ha pedido una reunión urgente de la Comisión Especial del Agua de la Asamblea Regional para que alegue en contra de la reciente modificación de las reglas de explotación del Trasvase-Tajo Segura, después del respaldo del Consejo Nacional del Agua al cambio propuesto por el ministerio para la Transición Ecológica.
El diputado del PP Jesús Cano ha advertido que con la modificación de las citadas reglas «se firma la partida de defunción del acueducto, siguiendo la hoja de ruta socialista marcada por Pedro Sánchez, sin importar el perjuicio que con esta decisión unilateral se hace a nuestros agricultores y regantes».
El Real Decreto que modifica las reglas de explotación del acueducto y que el Ministerio para la Transición Ecológica quiere publicar cuanto antes permitirá reducir el caudal de los trasvases en nivel 2, pasando de 38 hectómetros cúbicos a 27, lo que según el Sindicato Central de Regantes equivaldría perder en torno a unos 95 hm3 al año.
Tras la postura del Consejo Nacional del Agua, Cano asegura que queda claro que el único objetivo marcado por la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, es el de «hacer daño a la región de Murcia y a un sector productivo esencial para nuestra economía como la agricultura».
El parlamentario del PP ha asegurado que «su decisión arbitraria supone reducir los envíos de agua en un 39% del agua para regadío y una subida del 22% en los costes del agua», y que con ello, «se rompe el acuerdo político más importante en materia hídrica, la Ley del Memorándum».
Regantes, organizaciones agrarias y empresarios se reunirán hoy en la sede de la Croem, en el marco de la Mesa Regional del Agua, para valorar la postura tomada por el Ministerio y contemplar actuaciones contra esta. El Scrats ya ha anunciado movilizaciones en Murcia y Madrid y se espera que los regantes de Alicante y Almería se sumen a las protestas.
Tras esto, queda pendiente la aprobación del plan hidrológico del Tajo, actualmente en revisión, que buscará aumentar los caudales ecológicos del río a su paso por Talavera, Toledo y Aranjuez, lo que tendrá como consecuencias otro recorte en los envíos a la cuenca del Segura.
