La nueva consejera de Educación y Cultura de la Región de Murcia, Mabel Campuzano, cuya entrada en el Gobierno regional se hará efectiva esta misma tarde, ha difundido en una carta a través de Twitter en la que pretende explicar su visión de las líneas que abarca su nuevo puesto y cómo afrontará la dirección del mismo. En esas líneas expone su postura sobre varios asuntos, algunos relativamente polémicos.

Campuzano afirma que se emplearán a fondo en recuperar la presencialidad en las aulas para el curso que viene, puesto que "llevarlo a cabo en este último trimestre sería demasiado precipitado". Sobre la polémica del pin parental afirma que no van a "sorprender a nadie" en lo tocante a "las líneas políticas", afirmando que mantienen "la defensa de la libertad de los padres para decidir la educación de los hijos", lo que, argumenta, supone estar en contra de la Ley Celaá, atacando además de forma directa a la ministra por su "vergonzosa contestación a un diputado que intentaba explicarle como su hija síndrome de Down había logrado su integración gracias a este tipo de enseñanza" (la educación especial).

Hace además mención a que tanto Vox como PP se muestran de acuerdo en contra de esta última ley, recordando que ambos partidos la han recurrido al Constitucional, tendiendo así un puente entre las dos formaciones y haciendo bandera de la formación de la que fue expulsada.

"En cuanto a Cultura queremos centrarnos especialmente en la defensa de nuestro patrimonio histórico", afirma en la misiva antes de argumentar que cree que no se le ha tratado bien en la Región, lo que ha contribuido a que el turismo cultural en la misma sea "muy limitado". "No pensamos que la cultura deba ser una herramienta ideológica, todo lo contrario", expresa en la misiva, antes de defenderse de la postura de los sindicatos, a los que acusa de atacarla antes siquiera de conocer su postura "por mera ideología".

"Me parece indignante que se quieran apropiar de la educación pública como si ésta fuese una propiedad de la izquierda. La enseñanza pública es de todos, y yo voy a defenderla y cuidarla porque es un pilar de nuestra Educación", sigue la futura consejera expulsada de Vox.

"Tienen que entender que el estar a favor de la enseñanza pública no puede suponer estar en contra de la concertada y la privada o al revés", concluye.

Sobre su "posible incorporación en el Partido Popular" es algo que dice no plantearse siquiera. "Nunca había estado afiliada a ningún partido y mi experiencia en Vox no ha sido muy edificante", ironiza. "Una cosa son las ideas que se dicen compartir y otra los aparatos, sobre todo los territoriales que no sabes a qué intereses pueden responder", finaliza.