Los regantes del trasvase Tajo Segura han anunciado este miércoles que en abril llevarán a cabo movilizaciones contra la decisión del Ministerio para la Transición Ecológica de modificar las reglas de explotación del acueducto "por motivos ideológicos".

El presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Francisco Lucas, ha dicho en rueda de prensa en la Cámara de Comercio de Murcia que la próxima semana reunirá al Círculo del Agua, integrado por agentes económicos y sociales, para concretar que tipo de movilizaciones se llevarán a cabo teniendo en cuenta siempre las circunstancias de la normativa sanitaria en esta pandemia.

Lucas ha manifestado que la ministra, Teresa Ribera, tiene una "intencionalidad alejada" de lo que el propio decreto que recoge la modificación de las reglas de explotación contempla, al único efecto de asegurar la regularidad de la llegada del agua al Levante "y no regalando cromos a Emiliano García Page, que está muy virulento ahora con el tema del trasvase".

El presidente de los regantes levantinos dijo que la modificación supone elevar la película de agua en los pantanos de cabecera, "lo que nos parece bien, pero no a costa de los regantes o de la propia población del Levante".

Ha justificado las movilizaciones también por el "proceso de planificación que plantea caudales ecológicos en algunos puntos del Tajo que dependen de Entrepeñas y Buendía, que nos parece fuera de lógica y ajeno a la técnica".

El presidente del SCRATS señaló que se pretende dar "un jaque, no sé si mate, pero sí muy importante al trasvase", por lo que se iniciarán protestas en abril "ajustándonos del mejor modo que atisbemos que pueda darnos mayor visibilidad nacional".

Además, anunció con esta decisión" habrá años en los que no habrá agua para regadío en Almería, Murcia y Alicante, y habrá comunidades de regantes que no tendrán posibilidad de disponer de otros recursos hídricos alternativos, porque no existen canalizaciones entre las desaladoras situadas en el litoral que les permitan recibir esos caudales".

"Y eso va a ocurrir previsiblemente este mismo año 2021", agregó, al tiempo que calificó de "chiste" las medidas que anunció Ribera como alternativa para el Levante, ya que la reutilización del agua de la depuración ya se está empleando en su totalidad en estos territorios y la conexión de las desaladoras con el regadío "no está ni en fase de anteproyecto y pueden tardar perfectamente 7 u 8 años. Todo está en fase de imaginación de la ministra".

El recorte de agua del trasvase, que calculan en unos 80 hectómetros cúbicos al año, "no es transición hacia nada".