Las aguas siguen revueltas en Ciudadanos tras el fiasco que supuso la derrota de la moción de censura y las bajas de dirigentes que están desangrando la formación de Ana Martínez Vidal. Ayer, el concejal Manuel Padín criticaba a la coordinadora autonómica por no haber cubierto sus expectativas a la hora de impulsar la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) de Cartagena. Además, pidió a la líder de los naranjas «que examine su conciencia» y «que analice lo que ha hecho con el partido a nivel nacional y regional y a qué punto nos ha llevado».

Vidal denunció ayer en Onda Cero que altos cargos del PP la presionaron para que comprara los terrenos de la ZAL de Cartagena por el doble de su valor. «Me tuve que apartar de esa operación», explicó ayer a esta Redacción.

La dirigente naranja señala que se reunió con él para explicarle la situación hasta en tres ocasiones y que él mismo «alabó» su gestión.

Para ella, las críticas del concejal de Cs en el Ayuntamiento de Cartagena tienen que ver «exclusivamente porque él no está en la nueva ejecutiva». En su lugar, la dirección naranja contó con María Amoraga, su número 2 en el Consistorio de la ciudad portuaria. «Busca una excusa», apunta.

«Si veía condiciones fraudulentas en los terrenos de la ZAL, tenía que haber dimitido», mantiene Padín.