El Juzgado de Instrucción número Dos de Jumilla ha admitido a trámite la querella presentada por la empresa J. García Carrión y ha acordado abrir diligencias contra su exdirector financiero F.V.C. por la presunta apropiación indebida de casi 1,3 millones de euros y por ocasionar pérdidas por 10,4 millones en operaciones de alto riesgo para las que no estaba autorizado.

Las diligencias abiertas por el juzgado, que incluyen también los presuntos delitos de administración desleal, falsedad documental y falseamiento de cuentas, se dirigen igualmente contra el hijo de aquel, C.V.I., como supuesto cooperador necesario, y contra las entidades financieras Bankia y Goldman Sachs International, sucursal en España, que figuran como posibles responsables civiles subsidiarios.

Según la empresa querellante, ambas tramitaron operaciones del exdirector financiero de compra de divisas que eran de alto riesgo y volatilidad pese a conocer que este carecía de poderes para ello.

El auto del juzgado de instrucción acuerda trasladar la querella a los denunciados y llamar a estos a declarar, junto con varios testigos, empleados de J. García Carrión y de las dos financieras citadas.

La resolución señala que “los hechos contenidos en la querella ofrecen suficientes indicios de verosimilitud para justificar la incoación del procedimiento penal”, por la presunta antijuricidad de los mismos, “que podrían ser constitutivos de los delitos señalados”.

La empresa J.García Carrión considera que su antiguo ejecutivo se apropió, supuestamente, de casi un millón de euros mediante anticipos no autorizados y de otros 340.000 en efectivo que había en una caja fuerte en efectivo, hechos descubiertos a raíz de la investigación interna llevada a cabo en la misma.

Igualmente expone en su querella que las operaciones financieras llevadas a cabo sin su autorización le han supuesto unas pérdidas ya consolidadas de 4,6 millones de euros y otros 5,7 millones que están en vías de reclamación.

La empresa jumillana ha dicho a Efe que las entidades financieras querelladas incumplieron la normativa bancaria al comercializar deficientemente derivados especulativos a un cliente no experto “aprovechándose de la deslealtad de su exdirector financiero”.

Y ha añadido que el Fondo Monetario Internacional (FMI) ya alertó de este tipo de operativas bancarias en un informe que denominaba a estos productos como “exóticos” y en el que se estimaba que las pérdidas sufridas por compañías de países como Brasil, Polonia, China y Japón ya superaban los 530.000 millones de euros.