Tras el terremoto político del miércoles y a expensas de la moción de censura que les desalojará del Gobierno regional, el gabinete de Fernando López Miras celebró ayer en San Esteban un Consejo de Gobierno que no fue uno más, como reconoció Javier Celdrán, que se estrenaba como portavoz tras la destitución de Martínez Vidal.

El Ejecutivo regional quiso mostrarse firme, subrayando su intención de seguir trabajando «hasta el último momento», en un Consejo de Gobierno «serio, solemne y profesional» según Celdrán, quien subrayaba que «solo se han tratado los temas del orden del día» y no el asunto más candente, la relación actual y futura entre los dos partidos, PP y Ciudadanos, tras la grieta abierta en el seno del Gobierno.

Entre esos temas figura la compra del Monasterio de las Monjas Carmelitas Descalzas de San José, en Caravaca de la Cruz, por un precio de 800.000 euros, una cifra inferior al valor de tasación del inmueble.

La oferta de venta trasladada por la mercantil titular del monasterio hará posible que este inmueble declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 2003 se integre en el patrimonio regional. El monasterio incluye el convento, la iglesia, la Casa de la Mandadera, los patios y callejones contiguos.

Se trata del primer establecimiento de las Carmelitas Descalzas en el antiguo Reino de Murcia y estuvo directamente promovido por Santa Teresa de Jesús en 1576. Está situado en la calle Mayor de Caravaca de la Cruz y cuenta con una superficie construida de 5.469 metros cuadrados.

Por otra parte, se ha autorizado la contratación de obras de construcción de un nuevo colegio en Librilla, con un presupuesto de 5,9 millones de euros, que albergará las enseñanzas de Educación Infantil y Primaria.