El sacrificio de los casi 900 terneros que viajaban a bordo del Karim Allah finalizaba este martes «sin indicidentes», informan fuentes del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).

La eutanasia de las reses comenzó el pasado sábado, un día después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) desestimase la suspensión cautelar de la orden de sacrificio de los animales que solicitaron los abogados de la empresa armadora del buque.

Después de cuatro días, finaliza el operativo del Punto de Inspección Fronterizo que han llevado a cabo los técnicos del MAPA, que se ha hecho cargo de la eutanasia de los terneros de forma subsidiaria.

Ahora, los cadáveres de las reses serán incinerados en la planta de residuos de Abanilla, hasta donde se han trasladado en camiones durante estos días.

Según indican desde el Ministerio, el proceso se ha desarrollado «según lo previsto». El buque Karim Allah ya ha abandonado la Dársena de Escombreras.

Finalizan así dos largas semanas para el Puerto de Cartagena y los ganaderos de la Región, que desde el viernes ya pueden dar salida por mar a sus animales.