El 8M ha provocado un enfrentamiento entre la Delegación del Gobierno y la Comunidad. El delegado, José Vélez, ha autorizado cuatro de las seis concentraciones organizadas por distintos colectivos para el Día de la Mujer, mientras que el titular de Salud, Juan José Pedreño, le pedía ayer que siga el ejemplo de Madrid y anule todas las convocatorias previstas en Murcia. Pedreño ha escrito dos cartas a Vélez en la última semana para convencerlo de que no permita aglomeraciones en las calles, pero el delegado responde que los informes jurídicos remitidos por Salud no establecen impedimentos de carácter legal suficientes para prohibirlas.

Veléz le ha enviado otra carta al consejero en la que muestra su extrañeza por la insistencia en que prohíba las manifestaciones feministas cuando la Comunidad ha autorizado «hace escasamente una semana el retorno del público a los eventos deportivos y espectáculos» que pueden reunir a más de 1.000 personas. Por ello califica de «sorprendente» la recomendación de Salud.

En la Región llegaron a comunicarse hasta siete manifestaciones y concentraciones para el 8M, aunque solo han sido autorizadas cuatro movilizaciones organizadas por distintos colectivos feministas en Murcia. La Delegación tiene sin resolver la quinta manifestación, que está pendiente del informe preceptivo que debe remitir la Policía Local. La resolución definitiva podría conocerse hoy mismo.

Otra movilización que estaba prevista en Lorca fue desconvocada, al igual que una concentración en apoyo de las víctimas del coronavirus.

La Delegación mantiene que ante las solicitudes para el 8M está siguiendo las mismas pautas que ha venido aplicando con las demás convocatorias.

Recuerda que para autorizar o denegar una manifestación debe tener en cuenta los informes preceptivos de la Policía Local del municipio en el que está prevista su celebración y de la Consejería de Salud.

Fuentes de la Delegación precisaron que los servicios jurídicos de esta institución no ven motivos para prohibir las convocatorias anunciadas teniendo en cuenta los informes que ha remitido la Comunidad, dado que no establece ningún impedimento concluyente en sus argumentos.

Los informes de Salud desaconsejan abiertamente la celebración del 8M atendiendo al riesgo de contagio que sigue existiendo en este momento, pero luego remiten al artículo 21 de la Constitución para recordar que el derecho fundamental a manifestarse «podrá limitarse, condicionarse o prohibirse cuando en la previa comunicación presentada por los promotores no quede garantizada la distancia personal necesaria para impedir los contagios».

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Finalmente, ante las atribuciones de la Delegación para tomar la decisión «que proceda», los servicios Jurídicos de Salud reiteran las medidas de prevención que deben ser adoptadas en todas las movilizaciones convocadas, entre las cuales destaca la imposibilidad de que se supere el centenar de participantes.

Sin embargo, el consejero de Salud es más contundente en su segunda carta al delegado y dice que «analizada la evolución epidemiológica en el territorio regional, recomendamos evitar a toda costa cualquier aglomeración que pudiera incrementar el riesgo de transmisión de la covid-19, apostando por un principio de cautela y prudencia en la flexibilización de las medidas, tal y como recomienda los expertos y organismos internacionales para no dar mensajes erróneos de relajación a la población ante el riesgo de una cuarta oleada».