Los bares de la Región de Murcia podrán abrir parte de su zona interior, un 30%, a partir de mañana. Así se decidía en la reunión del Comité de Seguimiento Covid de ayer. La medida afecta a 37 municipios de la comunidad, que tiene ocho localidades en riesgo extremo, tras dispararse la incidencia.

Dentro de los establecimientos hosteleros, mesas de dos, esto es, solamente podrán sentarse dos personas no convivientes juntas. Si se trata de vecinos que viven juntos, no hay límite: una familia de seis miembros que residen bajo el mismo techo puede ocupar una mesa. Asimismo, las terrazas podrán estar al 100% y las barras siguen sin uso. En cuanto al toque de queda, se mantiene como está: a las diez de la noche, todo el mundo en casa.

El Comité de Seguimiento de la Covid decidía, en su reunión de la semana pasada, ampliar el número de personas no convivientes que se pueden reunir en la Región, tanto para ir a la terraza de un restaurante como para asistir a una celebración privada en una casa. Este límite pasaba de dos personas a cuatro en virtud de una medida que entraba en vigor el pasado miércoles. Esto se mantiene así: ahora lo que ha cambiado es que también se abrirán unas mesas del interior de los locales.

«Sigue mejorando la presión asistencial en nuestros hospitales: no obstante, seguimos teniendo 80 camas de UCI ocupadas con covid», manifestaba ayer el consejero de Salud, Juan José Pedreño, que admitió que podría venir «una cuarta oleada».

Repuntes y cepas nuevas

«La notable mejoría de las cifras no debe llevarnos a una relajación de la ciudadanía: no podemos hacer una desescalada rápida», subrayó. Insistió en que, en el caso de los bares, es importante tener la mascarilla puesta cuando no se esté comiendo o bebiendo.

A pesar de que los datos de contagios son mejores, sigue habiendo mucha gente ingresada en Cuidados Intensivos (80 ayer). Lo que sí ha detectado Salud es que comienza a notarse el descenso en el número de fallecidos. Aunque se pasa a la fase 1 de nivel asistencial, que se dejó en diciembre, insisten los expertos en que no hay que bajar la guardia. «Se normaliza un poco más la atención al resto de patologías» que no son coronavirus, indicó Pedreño.

Los repuntes y las nuevas cepas (hay confirmados en la Región 77 casos de la variante británica) son la principal preocupación de los expertos de Sanidad.