Las solicitudes para ocupar la vía pública e instalar zonas externas de bares y restaurantes aumentan considerablemente desde que comenzó la pandemia. Los datos recabados de las cuatro ciudades más pobladas de la Región (Murcia, Cartagena, Lorca y Molina de Segura) revelan que, en algunos casos, las demandas de nuevas terrazas o ampliaciones de estas se han incrementado hasta un 75%. 

Según los datos facilitados por el Ayuntamiento de Murcia, la capital contaba con 400 terrazas al corriente de pago antes de que la pandemia del coronavirus estallara en marzo de 2020. Actualmente hay 300 terrazas más distribuidas en la ciudad (197) y en las pedanías (103), lo que supone un incremento del 75%. Este número de solicitudes se desglosan en 145 nuevas terrazas, 131 ampliaciones y 24 nuevos titulares. El concejal de Comercio, Mercados y Vía Pública, Juan Fernando Hernández, pide a la ciudadanía «comprensión en esta situación tan excepcional que estamos viviendo, porque la única forma de salvar a los hosteleros es ampliar las terrazas». «Como ya se está viendo, hay una expansión de terrazas en la ciudad de Murcia nunca antes vista, sumando 300 más a las 400 que ya había», apunta el edil. Además, informa que el Ayuntamiento ha dispuesto de una ampliación de técnicos y delineantes para reforzar el incremento de la demanda de trámites relacionados con las terrazas hosteleras.

Cartagena cuantifica 300 solicitudes más desde el inicio de la crisis sanitaria frente a las 90 que tuvo en el año 2019. Según ha informado el Consistorio a este periódico, en lo que va de 2021 ya son 20 las peticiones: 16 altas de nuevas terrazas y cuatro ampliaciones de las mismas. Su concejal de Vía Pública, Juan Pedro Torralba, afirma que están estudiando la viabilidad de todas las solicitudes que les llegan por parte de los hosteleros. «Nuestra intención, como ha sido siempre, es intentar darles todas las facilidades posibles para que puedan prestar servicio garantizando la distancia social y las normas sanitarias», apunta el edil.

Sin terrazas no hay paraíso

Sin terrazas no hay paraíso Eva Moya

En el caso de Lorca, este tipo de trámites se pusieron en marcha en mayo del pasado año. A día de hoy, pese a que el proceso sigue abierto, se han acogido 152 establecimientos para la ampliación de terrazas. Según fuentes del propio Ayuntamiento, antes de la covid tan solo había autorizados 51 locales hosteleros. «El incremento de solicitudes tanto para ampliar como para conceder nuevas terrazas consideramos que ha sido muy positivo para que los hosteleros puedan seguir su actividad y por ende que todas esas familias que dependen de la hostelería puedan obtener recursos con los que subsistir ante las medidas sanitarias que se implementan para salvar vidas, si bien también se han de implementar medidas paralelas en el ámbito económico para salvar empleos y no destruirlos», valora Francisco Morales González, concejal de Economía de la Ciudad del Sol. El edil añade que Lorca ha aprobado ya «la segunda línea de ayudas a fondo perdido para mitigar los efectos de la pandemia. 

Esta segunda línea de ayudas asciende a 425.000 euros, de los cuales 300.000 son para hostelería, con importe de hasta 2.000 euros para cada negocio». 

Por su parte, el Ayuntamiento de Molina de Segura ha recibido 41 solicitudes desde que comenzó el tormento de los hosteleros con la pandemia. Por contra, en el año 2019 solo hubo 21 peticiones, según datos del citado consistorio. La Concejalía de Comercio valora «muy positivamente la reapertura de las terrazas, pues es un indicativo de la reducción de la incidencia de contagios en el municipio, pero sobre todo es la mejor noticia que podían recibir nuestros hosteleros tras sufrir las consecuencias de varios cierres y normas erráticas y confusas en muchas ocasiones». El edil, Andrés Martínez Cervantes, con competencias en Turismo y Comercio del municipio molinense, dice que «el sector va recuperando la actividad, y más que un incremento de solicitudes de nuevas terrazas, hemos recibido peticiones de aumento de algunas de las existentes, las cuales atenderemos y aprobaremos siempre que exista espacio disponible en la vía pública y no interfiera con el tráfico u otras actividades». 

Maite Maneses, de la Asociación Gastronómica de Molina de Segura, afirma que las ampliaciones de las terrazas han aumentado un 40%: «Donde antes había 10 mesas, ahora hay 20». Esto se debe «a la norma de que solo se podía sentarse en la mesa dos personas no convivientes y abrir solo el 75% del local». Según Maneses, «en Molina hay 170 bares y el 45% no tienen terraza por lo que la mayoría están haciendo los trámites para solicitarlas». Además, valora que «es más fácil ampliar la terraza que ponerla de nuevo porque eso requiere levantar aparcamientos o cortar la calle y eso genera mucha más burocracia». «En mayo estas gestiones se resolvían a un ritmo bastante rápido porque a los dos días el técnico ya estaba haciendo su trabajo, pero ahora va todo muchísimo más lento», apunta.

Ahora, exentas de impuestos

Esta demanda masiva de peticiones a los consistorios se debe a que los hosteleros solo pueden abrir a los clientes la zona exterior del bar o restaurante. Esta reapertura de la hostelería tuvo lugar el pasado 17 de febrero, autorizándola la Consejería de Salud. 

Todas estas ampliaciones y creaciones de terrazas se venían realizando por parte de los hosteleros para, de alguna manera, salvar el bache económico. Es por ello que el pasado 24 de febrero se aprobó en el Pleno del Ayuntamiento de Murcia que se eliminasen las tasas a las terrazas durante todo el año 2021. La propuesta, aprobada por unanimidad por todos los grupos políticos, permite que los hosteleros quedan exentos de impuestos a la hora de instalar más mesas y sillas en las terrazas del municipio murciano en lo que queda de año. Esta decisión ha sido adoptada tras mantener diversas reuniones con Hostemur en las últimas semanas. Así, esta medida tributaria, sumada a las tomadas anteriormente, va suponer una inyección de económica al sector de la hostelería por un valor de 1.300.000 euros.