«Ahí tienes la puerta», le espetó por Twitter el senador autonómico por Murcia Miguel Sánchez a Carlos Cuadrado, vicesecretario primero de Ciudadanos, tras conocerse el resultado electoral del partido en las elecciones catalanas del domingo en las que los naranjas perdieron hasta treinta diputados (relagándose al séptimo lugar).
Al día siguiente, la ejecutiva nacional del partido se reunía con carácter de «urgencia» en Madrid para valorar los comicios. Allí acudieron la coordinadora autonómica en la Región, Ana Martínez Vidal, y la vicepresidenta del Gobierno, Isabel Franco. El encuentro se producía después de una resaca electoral en la que senadores como el caravaqueño y algunos diputados habían pedido a la dirección que se asumieran responsabilidades.
Ya en la reunión, que duró cinco horas, José María Espejo, vicesecretario general adjunto de Cs, pedía a los asistentes que respondieran a los senadores, como Miguel Sánchez y Fran Hervías, que habían sido críticos con la cúpula naranja.
Miguel Sánchez explicó ayer a esta Redacción que está «encantado de debatir con todo el mundo», si es a eso a lo que se refería Espejo al pedir a sus compañeros de partido que respondieran a sus críticas. Del mismo modo, explica que «pedir responsabilidades políticas no es faltar al respeto», por lo que espera que no se produzca una «caza del crítico».
En este sentido, reconoce que algunos ‘trolls’ de Twitter le atacaron en la red social después de pedir que Cuadrado abandonara el cargo, «y algunos parecían de dentro del partido». De cualquier modo, pide que se haga una «reflexión interna» para ver «qué ha pasado y hacia dónde va Cs».
Mucha participación
Pese a que la murciana Martínez Vidal asegura que la reunión fue «muy constructiva» y en la que «casi todo el mundo intervino», lo cierto es que algunos asistentes aseguran que había una «sensación de herida de muerte». Begoña Villacís o Toni Cantó se mostraron visiblemente contrariados y «frustrados» por la situación.
