El respeto que el personal sanitario de la Región de Murcia tiene hacia el hasta ahora consejero de Salud, Manuel Villegas, choca de frente con la valoración profunda y sincera que acaban haciendo de la crisis generada a costa de la vacunación del personal administrativo de las oficinas del SMS y la Consejería de Salud: No era el momento y se ha equivocado. Pese a que Villegas señalaba ayer haber recibido innumerables muestras de cariño y apoyo tras conocerse la noticia, las voces de representantes de sociedades médicas, sanitarios, sindicatos o antiguos altos cargos del SMS con gobiernos del Partido Popular en San Esteban consultados por este periódico señalan, por un lado y no todos ellos, que entienden la vacunación del exconsejero por ser «personal médico» y no político, y, por otro, que no parece razonable la vacunación de personal no asistencial aunque trabajen para los gestores de la sanidad en la Región.

El argumento de proteger a la maquinaria administrativa del SMS y Salud, justificación de Villegas, no es compartida por la gran mayoría, pues se prioriza a unos funcionarios sobre otros que también trabajan en la gestión de áreas con riesgo de contagios. José Abenza, Sociedad Murciana de Medicina Familiar

"La vacunación sin tener en cuenta criterios técnicos es sorprendente"

«Ha sido un hecho sorprendente y de gran magnitud que es difícil calibrar», señala Jesús Abenza, vicepresidente de la Sociedad Murciana de Medicina Familiar y Comunitaria. Entiende el médico de familia la postura de «engrasar y proteger» a la maquinaria administrativa del Servicio Murciano de Salud por tener departamentos como el de Recursos Humanos encargados de la contratación del personal sanitario y que de verse afectado por un brote dejaría comprometida una tarea esencial ahora mismo. Sin embargo, Abenza muestra su preocupación a la hora de cumplir o no la guía de vacunación: «La vacunación sin tener en cuenta criterios técnicos es bastante sorprendente». Añade que hay grupos de riesgo que evidentemente tienen prioridad en la inmunización frente a otros.

Francisco Agulló, exgerente del SMS

"No es razonable que el personal de Habitamia se vacune"

«El consejero es médico y entiendo que debe vacunarse», señala Francisco Agulló, exgerente del Servicio Murciano de Salud, «no pertenece a un grupo de riesgo directo ni a un grupo de los prioritarios, pero puede solicitarlo». Agulló fue de las primeras voces públicas dentro del cuerpo de profesionales sanitarios de la Región en posicionarse en contra de la decisión que ordenó ejecutar el que le sustituyó en el cargo, Asensio López, por ahora gerente del SMS pese a la salida de Villegas, pero considera que «no es razonable ni tiene justificación que el personal sanitario de los edificios de administración del Servicio Murciano de Salud y la Consejería se vacunen». Por contra, aquel personal que no sea sanitario pero que trabaje en un centro hospitalario que está con atención a personas contagiadas, «sí es lógico vacunarle». Agulló subraya su desconcierto al saber cómo se produjo todo el proceso ahora convertido en crisis y que le ha costado el cargo a Villegas: «Se vacunó a todo el que quiso, personal sanitario y no sanitario del edificio Habitamia (sede del SMS) y de la Consejería de Salud. Circularon listas y se vacunó todo el que quiso».

Antonio Iofrío, Asociación de Pediatría Extrahospitalaria

"La decisión, de cara a la opinión pública, no ha sido acertada"

«La decisión, de cara a la opinión pública, no ha sido acertada», señala el pediatra Antonio Iofrío, presidente de la Asociación de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria de la Región de Murcia. El médico no ve correcto lo que ha ocurrido con el protocolo de vacunación que ha seguido la Consejería de Salud y el Servicio Murciano de Salud y tacha la decisión del exconsejero Villegas de «poco oportuna».

José Antonio García Córdoba, exdiretor general de Farmacia

"Si se ha trastocado el plan de vacunación, alguna justificación debe de haber"

Las voces a favor del exconsejero llegan de un alto cargo de la Consejería de Salud. José Antonio García Córdoba, quien fue director general de Planificación, Ordenación Sanitaria, Farmacéutica e Investigación con la consejera de Sanidad María Ángeles Palacios, salió en defensa de Villegas, de quien señala que «tiene todo mi aprecio» y que la decisión tomada estará «perfectamente motivada». García Córdoba señala que «si se ha trastocado el protocolo de vacunación, alguna justificación deben tener».

Asociación de Usuarios de la Sanidad de la Región de Murcia

"Esperamos un informe de Salud Pública, no valen las explicaciones"

No son personal sanitario de primera línea y no les tocaba. La Asociación de Usuarios de la Sanidad de la Región de Murcia se mostró contundente ayer: «No valen las explicaciones y esperamos un informe de Salud Pública que justifique que el consejero de Salud y el personal de los edificios administrativos de Murcia Salud y de la Consejería hayan recibido la vacuna no estando en los supuestos contemplados en los grupos prioritarios de vacunación».

José María Almela, médico de familia en Cieza

"Hay también compañeros sin vacunar y dependientes"

El médico de familia del Centro Salud Cieza Oeste, José María Almela, es otra voz que se posiciona en contra de la vacunación del personal administrativo y funcionarios del SMS y Salud al «no estar en primera línea». «No se entiende que se haya vacunado a todos los funcionarios y que haya compañeros todavía sin vacunar y que estén tratando a pacientes con coronavirus». Las prioridades para el sanitario son todos aquellos profesionales de la salud y las personas dependientes que todavía no han tenido acceso a la vacuna, pero no para los empleados que sean «no asistenciales».

José Antonio Blaya, secretario general de Satse Murcia

"No es el momento de pedir dimisiones en mitad de la tercera ola de covid"

Para José Antonio Blaya, secretario general del sindicato de enfermería Satse en Murcia, «no es el momento de pedir dimisiones», dado el contexto actual de la pandemia, pero no es de recibo que se produzcan alteraciones del protocolo de vacunación para favorecer a unos funcionarios frente a otros.