Unos 80.000 ancianos que viven en sus domicilios siguen esperando su turno para vacunarse contra el coronavirus, a pesar de ser uno de los grupos vulnerables que más preocupa en estos momentos. Policías, profesores, transportistas y otros trabajadores de diversas profesiones esenciales, así como los sectores de la población considerados 'de riesgo' frente al virus también esperan pacientemente para ponerse la vacuna contra la covid.

Sin embargo, en la Región de Murcia diversos altos cargos de la Comunidad han decidido usar su poder y su influencia para saltarse el protocolo acordado entre todas las comunidades autónomas y el Gobierno de España y ponerse la vacuna para estar protegidos frente a la covid: el consejero de Salud, Manuel Villegas, otros altos cargos de la la Consejería que dirige y empleados públicos no asistenciales recibieron la semana pasada 'en secreto' la vacuna contra el coronavirus, a pesar de no estar en los grupos prioritarios de vacunación en estos momentos.

Según pudo saber esta Redacción, los hechos se produjeron el pasado miércoles 13, cuando el director gerente del Servicio Murciano de Salud (SMS), Asensio López, dio la orden de que una ambulancia del SUAP acudiese al edificio Habitamia, sede del SMS ubicada en la pedanía murciana de Espinardo, para vacunar al consejero, altos cargos y funcionarios del SMS, muchos de ellos no asistenciales, así como asesores jurídicos y personal administrativo de la Consejería que dirige el propio Villegas.

Además, la inoculación de las dosis en este personal se habría prolongado durante más de un día. Estas dosis habrían llegado también al personal de la Dirección General de Recursos Humanos del Servicio Murciano de Salud, edificio dependiente de la Consejería y que se ubica en la calle Pinares de Murcia.

Y todo esto se produce a pesar de que la 'Estrategia de vacunación frente a la covid', emitida el pasado 18 de diciembre del pasado año por el Ministerio de Sanidad, dejase bien claro que la campaña de vacunación tendría que llegar durante su primera fase «de manera priorizada» a los trabajadores de los centros sanitarios, como hospitales o centros de salud. La Consejería de Salud emitió ayer un comunicado defendiendo que la campaña de vacunación en la Región alcanzaba también al «personal propio del Servicio Murciano de Salud y de la Consejería de Salud», así como a «todos los profesionales del sistema sanitario regional, incluido Salud Pública, rastreadores, laboratorio o inspección».

Desde Salud indicaron, además, que el objetivo prioritario es «evitar brotes en cualquier tipo de instalación sanitaria regional que trabaja en la gestión de la pandemia».

De esta forma, indicaron que se vacunaron «los miembros del equipo directivo que son sanitarios y que lo han solicitado» y que la información de vacunación es «personal y confidencial». Asimismo señalaron que «el equipo directivo forma una parte esencial dentro de la gestión de la pandemia». Consultada la vicepresidenta del Gobierno, Isabel Franco, al frente de la consejería de Política Social -de la que depende el IMAS, que lleva la gestión de las residencias de ancianos y de personas con discapacidad públicas- aseguró que ni ella ni su equipo han recibido la vacuna y esperará a la fase en la que le corresponda recibir la dosis.

Salud explicó que solo se vacunaron «miembros del equipo directivo de la Consejería formado por sanitarios. Sin embargo, esta redacción pudo confirmar que incluso se vacunó a asesores jurídicos y personal de administración.